Benidorm recuperó en junio el nivel de ocupación anterior a la crisis

Han tenido que confluir varios factores, pero lo que cuenta es el resultado. La capital turística valenciana ha iniciado la temporada turística de verano con cifras de ocupación como las de 2007, antes de que la crisis también afectara a la principal industria valenciana.

Benidorm acabó junio con una ocupación del 89,2%, según las cifras facilitadas por la patronal Hosbec, solo dos décimas por debajo del 89,4% que registró el mismo mes de 2007. Además, durante la segunda quincena del mes pasado la ciudad mantuvo ocupadas el 91,2% de sus más de 40.000 camas, con picos de lleno absoluto el fin de semana del puente del Corpus (23 de junio). El dato mensual representa un incremento de 6,9 puntos de ocupación con respecto a junio de 2010, el peor del último quinquenio.

Por mercados, como es habitual cuando llega el verano, la mayoría de visitantes de junio han sido extranjeros; en concreto, el 51,2% del total. Del global de clientes, el 40,6% han sido de procedencia británica, un mercado que sigue recuperándose y va en ascenso. Y, lo que todavía es más llamativo, el segundo mercado extranjero en importancia es ya el portugués, con el 3,3% de las visitas. Los belgas, que representan el 2,7% y los holandeses, con el 1,8% completan la casi totalidad de las visitas foráneas.

En Hosbec ya han hecho cuentas, basadas en las reservas realizadas, que el resto del verano continuará con esta tendencia y Benidorm alcanzará al menos los niveles de ocupación hotelera del año 2007. El presidente de la patronal, Antoni Mayor confirma que "será un verano de los mejores que hemos vivido, porque además estamos incrementado la rentabilidad". Una de las razones es que el tirón de la demanda ha hecho desaparecer casi por completo las ofertas de última hora.

De hecho, los mismos hoteleros sitúan la previsión de ocupación de Benidorm en la primera quincena de julio en el 86,3%, que ya es superior en cinco puntos al dato obtenido el año anterior.