La hora de Forlán

Hace ni un año que Diego Forlán (Montevideo, 1979) fue distinguido como el mejor jugador del Mundial de Suráfrica, en el que marcó cinco goles para Uruguay, la revelación de un torneo en el que terminó clasificado en la cuarta posición Pero 12 meses dan para mucho, máxime si juegas en un equipo como el Atlético, en el que fue relegado por su entrenador, Quique Flores, sustituido ahora por Gregorio Manzano.

Desaparecido de la competición desde el 10 mayo, Forlán ha tenido que realizar un trabajo específico, tres sesiones diarias, para llegar a la Copa América en un punto de forma óptimo. Siempre positivo, asegura que llega en su mejor momento. "No es la primera vez que trabajo tres veces al día tras una Liga en la que uno termina extenuado. Tuve la oportunidad de hacer este acondicionamiento físico en España y Uruguay. Así que esperamos que se den los resultados para ayudar al equipo a que logre los objetivos", aseguró al llegar a San Juan, donde esta madrugada (0.15, Canal + Liga) se estrenará contra Perú.

El mejor jugador del pasado Mundial no marca un gol desde el 5 de marzo

San Juan es la ciudad donde su vida cambió de golpe. "La vida tiene estos guiños", admite el delantero charrúa al recordar que fue allí, hace 10 años, estando de pretemporada con el Independiente, donde recibió la llamada de Alex Ferguson ofreciéndole firmar por el Manchester United. El club de Avellaneda no dudó y le vendió por 10 millones de euros.

El círculo se cierra: En Las Chacritas, el 21 de enero de 2002, cogió el avión que le llevó a Europa cuando apenas era un prometedor futbolista y por ahí volvió la pasada semana a Argentina convertido en un referente de la selección celeste. No lo puede negar: "No había vuelto a este aeropuerto desde entonces. Así que, al llegar, aquellos tiempos me volvieron a la mente".

Aseguran sus amigos que El Cacha, como le llaman desde que era un niño, tras la experiencia en el Atlético, en el que tiene todavía dos años de contrato, comparece en esta Copa América con la ilusión de un juvenil. "Nunca ha estado tanto tiempo sin marcar", dicen. La última vez que gritó gol fue el 5 de marzo, contra el Villarreal. "Está que la muerde", asegura Luis Suárez, que probablemente le acompañará esta noche en el frente de ataque. Por lo que a Forlán respecta, lo tiene claro: "Voy a disfrutar como nunca". Uruguay, que ha ganado 14 veces la Copa América, no levanta el trofeo desde 1995. Forlán está convencido de que este año la ocasión la pintan calva. "El grupo está muy hecho, llevamos juntos mucho tiempo y esta oportunidad, tras el Mundial, es linda porque muchos uruguayos se pueden acercar a Argentina. Así que, la verdad, tenemos muchas ganas. No es fácil, no hay equipo chico, pero llegamos con la idea de ganar el torneo".

Para empezar tendrán delante a la selección de Perú, a la que el seleccionador, Óscar Tabárez, ha calificado de "equipo moderno". Para Forlán se trata de un equipo que siempre jugó bien la pelota, con buenos jugadores a pesar de las ausencias de Farfán y Pizarro: "En ningún momento nos sentimos inferiores ni superiores a nadie. Tenemos un buen equipo y, si hacemos las cosas bien, podemos ganar a quien sea", sostiene.

Para su desgracia, en las últimas semanas se ha hablado de él más por razones sentimentales que futbolísticas. A un mes de su boda con Zaira Nada, una conocida modelo argentina, Forlán terminó de repente la relación. Así que lleva semanas en las portadas de la prensa del corazón. De eso también habló sin problema el pasado sábado: "Entiendo que soy conocido y, obviamente, lo que haga tiene repercusión. Es muy simple: tuve una relación y decidí terminarla. No hay que hacer ningún drama. Mi vida no cambió en nada. Sigo haciendo las mismas cosas de siempre".

Lo que espera la afición charrúa es que, además, siga haciendo goles. O sea, lo que siempre hizo El Cacha.