Las peticiones de ayuda a Cáritas crecen un 39%

La crisis sigue teniendo su impacto en los más desfavorecidos, como muestra el incremento de asistencias de Cáritas en 2010. Ese año, la entidad católica asistió a 75.240 personas, frente a las 54.002 del año anterior, lo que representa un aumento del 39%.

Así lo indicó ayer Vicent Andrés, coordinador de acción social de Cáritas Diocesana de Valencia, que abarca prácticamente la provincia de Valencia y las comarcas de Las Marinas o L'Alcoià, acompañado por el obispo auxiliar de Valencia, Enrique Benavent, y la directora de la entidad, María de la Concepción Guillén, en la presentación de la memoria anual.En el acto, los miembros de la institución mostraron su especial preocupación por "el aumento de la vulnerabilidad de las personas y el incremento de las desigualdades sociales". También destacaron la "creciente debilidad del sistema de protección social" en la Comunidad Valenciana. Por ello, los portavoces de Cáritas hicieron un especial llamamiento a las Administraciones públicas "para que refuercen la red de protección y los servicios sociales", así como evitar "que se reduzcan los presupuestos destinados a estas partidas, a la integración social de las personas inmigrantes, a la ayuda al desarrollo y al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio" contra la pobreza global.

En la rueda de prensa, Vicent Andrés destacó que han percibido un incremento no solo de los casos en situación de desprotección, sino que se observa una cronificación de esta circunstancia en esta población. "La cronicidad tiene que ver con las oportunidades del mercado de trabajo, que son escasas, y con que no se están dedicando los recursos necesarios suficientes desde el sistema social", aseguró.

El 63% de las personas atendidas en 2010 fueron extrajeras. Pese a que el número de atenciones a extranjeros sigue siendo muy elevado, se está empezando a notar un incremento de peticiones de ayuda por parte de españoles.

De hecho, en algunas poblaciones -entre ellas, las situadas entre Llíria y Bétera- los porcentajes de atenciones se están equilibrando. "Cada vez van más españoles. Los que acuden ya no tienen más alternativa", explicó.

También en 2011 el número de españoles que solicita ayuda está creciendo. Sobre este aspecto Vicent Andrés matizó que está empezando a haber movimientos xenófobos que "preocupan", pero insistió en que "no sobra nadie, ni los inmigrantes que han venido a España jugándose la piel", comentó.