Los empresarios alertan del "retroceso" de la economía

La patronal alavesa sigue viendo luces rojas ante el incierto futuro de la economía provincial. El presidente del SEA, Juan José Azurmendi, advirtió ayer de que la situación en la provincia se encuentra "estancada" y "en retroceso".

Sostuvo que, según los datos del barómetro de su organización, en seis meses la actividad económica alavesa ha perdido el 75% de lo que había logrado recuperar en los anteriores 10. El presidente del SEA cree necesario avanzar hacia un modelo económico "flexible" tanto en salarios como horarios, con sindicatos "más constructivos y representativos", así como Administraciones que creen un entorno de confianza.

Azurmendi propuso también la creación de una mesa de desarrollo económico, bautizada como Araberri 2020, en la que estén representados además del SEA, la Diputación, el Ayuntamiento de Vitoria, la Cámara de Comercio y Caja Vital, para elegir apuestas estratégicas de futuro y mejorar la coordinación interinstitucional. La idea recuerda al lobby Gipuzkoa Aurrera.

Instituciones estables

La patronal también recalcó la necesidad de que los nuevos gobiernos municipales y forales antepongan la "estabilidad institucional". En todo caso, aclaró que mostrará su plena disposición a colaborar con estos "sean del color que sean". Sobre la irrupción de Bildu en el mapa político, Azurmendi recalcó que la coalición ha surgido de forma democrática y deseó que allí donde gobierne lo haga lo mejor posible.

El presidente de la patronal alavesa quiso confiar en que se la recuperación económica llegará, pero subrayó que el proceso será muy lento. "Las empresas lo han pasado mal durante este año 2010 e incluso muchas han desaparecido, y todavía quedan muchas pruebas por superar, pero esto debe motivarnos para ver que la crisis no ha impedido que 1.736 personas hayan decidido arriesgarse y crear una empresa en Álava", destacó.

Respecto a la reforma de la negociación colectiva que será aprobada el próximo viernes por el Gobierno central, ante la falta de acuerdo entre los sindicatos y la CEOE, Azurmendi dijo temer que el Ejecutivo saque adelante una reforma próxima a las tesis de UGT y CC OO, lo que dejará un escenario "muy confuso y muy negativo" y "no hará más que perjudicar la situaciónl".

En su opinión, "el conservadurismo" de las centrales en la negociación ha lastrado las negociaciones. "No han estado a la altura de la situación", dijo.