A juicio 31 testaferros del narco huido Pelopincho
La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra ha fijado para el próximo 21 de junio el inicio de la vista oral contra los 31 presuntos testaferros del narcotraficante José Antonio Pouso Rivas, Pelopincho, acusados de cooperar en el blanqueo de 15 millones de euros que fueron intervenidos en la llamada Operación Cormorán.
Será el mayor juicio por blanqueo que se celebra en Galicia, tanto por el dinero y los bienes intervenidos como por el número acusados que se sentarán en el banquillo. Un macroproceso que ha obligando a la Sala a buscar un lugar alternativo fuera de la Audiencia Provincial con aforo suficiente para sentar a tantos acusados y sus respectivos letrados. Entre los que ocupen un lugar en el banquillo no estará el propio Pelopincho, un camarero de Ribeira que hizo fortuna con las drogas y que se encuentra en paradero desconocido.
La Sala, presidida por el magistrado José Ramón Barreiro Prado, decidió comenzar el juicio cuanto antes, ya que en principio se prolongará hasta la primera semana de julio. Terminan así las negociaciones que iniciaron hace tres meses los dos fiscales asignados al caso con los abogados defensores, que no han permitido alcanzar acuerdos con todos.Solo 17 de los acusados han reconocido el delito y asumido las penas solicitadas por la fiscalía a cambio de algún beneficio penitenciario, que se concreta en una reducción de las condenas. Entre ellos se encuentran familiares del narcotraficante y los dos directivos de la entidad Arte y Naturaleza que habían vendido a Pouso Rivas facsímiles de manuscritos medievales y del Renacimiento por valor de 600.000 euros.
La mayoría se enfrenta a penas de cuatro a seis años de prisión por delito continuado de blanqueo de capitales y multas que suman 144 millones de euros. En el caso de las cuatro compañeras sentimentales de Pouso Rivas, brasileñas que trabajaban en clubes de alterne que gestionaba el narco en diversas localidades de Pontevedra y A Coruña, el ministerio público solicita la pena máxima. Los fiscales antidroga y de delitos económicos solicitarán el decomiso del extenso patrimonio de Pelopincho, que está bajo embargo preventivo desde 2004. Una parte probablemente será vendida en subasta pública y el resto pasará al Plan Nacional sobre Drogas.
Sospechas de saqueo
La falta de una administración judicial ha puesto en riesgo todos los bienes, ya que los investigadores desconocen no solo en qué estado están los enseres y el mobiliario de los 43 pisos y cuatro chalés embargados sino que existen dudas razonables de que fuesen saqueados. Pelopincho no había escatimado en gastos, según el inventario que llegó a la Fiscalía de Pontevedra hace siete años, en el que también aparecían 35 coches y 36 fincas.
El juicio arranca con los dos principales acusados en busca y captura. La orden contra Pouso se dictó hace apenas un mes, aunque su rastro se perdió a finales del pasado año cuando, salió de la cárcel en libertad condicional y quebrantó las medidas cautelares impuestas por el juez de presentarse cada 15 días en el juzgado. Acusado de blanqueo de dinero, tenencia ilícita de armas y falsificación de documentos, Pelopincho se enfrentaba a más de siete años de cárcel y 46,5 millones de euros de multa.
Con una petición de condena similar, la Interpol busca desde hace cinco años al abogado de Pelopincho y presunto cerebro de la trama societaria que fue creada para blanquear dinero. Manuel Blanco Argibay pagó una fianza de dos millones de euros, aunque antes de huir retiró 1,2 millones de un banco en Portugal.
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