Reparto partidista de ayudas municipales

Las transferencias y subvenciones a municipios registradas en el presupuesto de la Comunidad Autónoma de Galicia se ordenaban en dos grupos distintos. El primero incluía los recursos propios de la comunidad destinados a financiar el Fondo de Cooperación Local, subvenciones a municipios y a otras entidades locales. El segundo grupo lo formaban las transferencias regladas que el Estado otorga a Diputaciones y Ayuntamientos, así como los ajustes derivados de liquidaciones definitivas. Estos recursos estatales reciben ahora un tratamiento extrapresupuestario.

Nuestra atención se centra en las subvenciones autonómicas a municipios en el período 2004-2008, dividiendo las mismas en dos partes distintas. La primera (2004-2005) gobernaba el PP hasta julio de 2005, fecha en que el grueso de estas subvenciones locales estaba ya decidido. La segunda parte (2006-2008) incluye las subvenciones que fueron distribuidas por el gobierno de coalición PSOE-BNG. No se analizan, pues, los recursos del Fondo de Cooperación Local ni los entregados a otros entes locales.

La agonía se basa, entre otras cosas, en un urbanismo lamentable

El resultado es dramático: picaresca, subordinación, desigualdad

En el período 2004-2005 las consellerías distribuyeron 334,6 millones de euros a los municipios. Esa distribución se muestra en el cuadro 1, como también incluye la cuantía de esos recursos si la distribución fuese igualitaria en términos de euros per cápita. Como es fácil apreciar, los municipios gobernados por el PP recibieron una cantidad adicional de 41,6 millones de euros, mientras los gobernados por el PSOE, BNG y otros registran déficits diversos (29,8 millones, 8,5 millones y 3,3 millones, respectivamente).

En 2004-2005 las ciudades más beneficiadas fueron Santiago (PSOE) y Ourense (PP), recibiendo subvenciones menores Vigo (PP) y A Coruña (PSOE). En el tramo de 20.001 a 50.000 habitantes, los Ayuntamientos más subvencionados fueron Lalín (PP), A Estrada (PP) y Ponteareas (PP), recibiendo los menores recursos Oleiros (otros partidos), Narón (otros) y Ames (PSOE). En el tramo de 10.001-20.000 habitantes ganan Cambados (PP), O Grove (PP) y Vilanova (PP), perdiendo Fene (BNG), Moaña (BNG) y Sarria (otras formaciones). Así era la lógica distributiva. Las subvenciones de los municipios más beneficiados multiplicaron por cifras que van de 3 a 54 (según tramos) las subvenciones que recibieron los municipios menos afortunados, cuando estas cantidades se expresan en euros per cápita. El sesgo clientelar era evidente.

En el período 2006-2008 las cosas cambian de forma radical. Las elecciones locales (2007) amplían los municipios del PSOE y BNG, que ya en el ejercicio 2006 registran recursos adicionales frente a los déficits del PP y de otros partidos. Las subvenciones totales son ahora mayores (723,8 millones de euros) y su distribución agregada muestra también cambios significativos. En efecto, al comparar de nuevo las subvenciones distribuidas en el período con un teórico reparto igualitario, expresado en euros per cápita (cuadro 2), solo los municipios gobernados por el BNG registran recursos adicionales (21,5 millones), contabilizando los demás déficits diversos (14,2 millones el PP; 6,3 millones otros partidos y 0,9 millones el PSOE).

En este período, las ciudades más subvencionadas fueron Santiago, Pontevedra y Ferrol, recibiendo menores recursos A Coruña, Ourense y Vigo. En los municipios de 20.001-50.000 habitantes Lalín (PP), Cangas (BNG) y Culleredo (PSOE) fueron los más afortunados, mientras Oleiros (otros grupos), Narón (otros) y Arteixo (PP/PSOE) reiteran su desgracia. En el tramo de 10.001-20.000 habitantes, las subvenciones más elevadas fueron para Rianxo (PSOE), Boiro (BNG), Poio (BNG) y Carballiño (PSOE), recibiendo los recursos menores Ordes (PP/ otros), Baiona (PP), Teo (PP/ BNG) y Cambados (PP). Este reparto partidario se reproduce en todos los tramos. La huella de Montero Ríos es así de profunda en políticos y ciudadanos.

Un resumen del reparto total de estas subvenciones en el período analizado (2004-2008) se muestra en el cuadro 3 y gráfico correspondiente. Como ya indicamos, los ejercicios 2004-2005 beneficiaron a los municipios del PP y perjudicaron a los demás. La situación se invierte en 2006 y 2007. Pero 2008 ofrece resultados sorprendentes. En ese ejercicio se produce una convergencia interesante entre los municipios del BNG, PP y PSOE con respecto a la cifra media per cápita de las subvenciones totales. ¿Un preludio de regeneración democrática en el reparto de subvenciones? La respuesta se encuentra en la distribución efectuada en 2009 y 2010. Una información que será fundamental para saber si se ha corregido o no el sesgo clientelar de esta distribución.

Hace unos años España era la octava potencia económica del mundo y la economía gallega aparecía fuerte, competitiva, internacionalizada y sometida a procesos de convergencia acelerados. Cuando la orgía alcanzaba el éxtasis, el atraso municipal de Galicia asustaba. ¿Se puede ser octava potencia mundial con municipios desajustados, descapitalizados y financiados con fórmulas tan primitivas? La agonía de los municipios gallegos se fundamenta en factores diversos: esfuerzo fiscal reducido, urbanismo lamentable, paternalismos excesivos y subvenciones desordenadas que completan la faena. El resultado final es dramático: dependencia, subordinación, irresponsabilidad, desigualdad, opacidad, picaresca, quiebra de la relación democrática. ¿Se puede ser octava potencia mundial en estas condiciones?

Xoaquín Álvarez Corbacho es catedrático de Economía Aplicada