Ferguson ya cuenta con De Gea

Un día después de que Sergio Agüero hiciera público su deseo de irse del Atlético, Alex Ferguson anunció el fichaje de David de Gea por el Manchester United por cinco temporadas. "Es un portero joven, rápido y de excelentes maneras. Será un gran recambio para Van der Sar", proclamó el mánager del equipo inglés, en Sky, tras un partido contra la Juventus (1-2) en homenaje a Gary Neville. "Hace tiempo que le habíamos identificado como un objetivo prioritario", añadió el escocés, feliz de haber encontrado sucesor para el holandés, que colgará los guantes a sus 40 años tras la final de Wembley; "David es comparable con Edwin por su colocación y su habilidad organizativa de la defensa". "Es un porterazo. Técnicamente, es muy bueno", le piropeó el propio Van der Sar. Mientras tanto, en el Atlético seguían anoche en silencio (el presidente, Enrique Cerezo, manifestó que no sabe nada), el mismo que mantienen desde que el Kun se plantara, 24 horas antes, decepcionado por la confección de una plantilla por debajo, en su opinión, de su nivel competitivo.

El escocés le compara a Edwin "por su colocación y habilidad organizativa"

La cláusula de rescisión del contrato del meta es de unos 20 millones de euros

En el traspaso del arquero, de 20 años, que rondaría los 20 millones de euros según la cláusula de rescisión de su contrato, intervino el agente Jorge Mendes, que mantiene estrechas relaciones con los Diablos Rojos y en especial con su director ejecutivo, David Gill. El portugués ha ido acaparando poder en el club del Manzanares desde que colocó en él a Costinha, Seitaridis y Maniche tras el Mundial de Alemania 2006. El punto culminante llegó a finales del año pasado, cuando influyó para que el consejero delegado del Atlético, Miguel Ángel Gil Marín, fuera nombrado el mejor gestor del mundo. Entonces, sus jugadores en la nómina rojiblanca eran Tiago, Simão, Costa y Elías (son de su cuerda los dos refuerzos para el curso que viene, los defensas Miranda y Silvio, a falta de la confirmación oficial).

La marcha de De Gea deja al Atlético sin su viga maestra en la portería. Y eso que dos veranos antes el director deportivo, Jesús García Pitarch, decidió repescar a Roberto, del Recreativo, por un millón y quería ceder al portero más prometedor del fútbol base al Numancia o a la UD Las Palmas. Suplente del suplente tras quedarse, De Gea, que tenía una oferta del Wigan de Roberto Martínez, terminó ganando el puesto a Asenjo tanto en el Atlético como en la selección española sub 21.

"Más allá de lo bueno que es, destacaría su comunión con la grada, que le ha adoptado como el nuevo Torres", solía decir Ángel Mejías, responsable de los metas del filial antes de irse con Bernd Schuster al Besiktas; "pero lo mejor que tiene, sin duda, es que es frío como un lobo. Es un producto nuestro, de la cantera, con su aplomo y su desparpajo". "¡Y qué decir de su colocación! Siempre suele estar en el sitio oportuno. Cubre muy bien la portería y en eso me recuerda a Van der Sar", añadía Emilio Álvarez, el preparador de porteros del primer equipo durante el mandato de Quique Flores.

De este modo, De Gea será el tercer cancerbero español en la Premier, junto a Reina (Liverpool) y Almunia (Arsenal), por más que no dejara el mismo sabor de boca en el curso recién concluido (53 goles: 1,39 de media) que en el de su debut. "Le acusan de no tirarse ante muchos disparos, de haber encajado muchos goles en los primeros remates. Pero el segundo año siempre es peor porque es el de la confirmación y ya hay parámetros para comparar. La exigencia a De Gea es altísima porque el listón lo ha puesto él mismo. No olvidemos que solo tiene 20 años", opinaba Álvarez. "Es un gran portero. Va a ser el que nos retire a todos", resumía el madridista Casillas.

En cualquier caso, pese a las evidencias, Cerezo se enrocó anoche en la tesis que el club mantiene desde hace meses. "No vendemos. De Gea tiene una cláusula y, oficialmente, nadie nos ha comunicado nada. Está aquí y tendrá que pasar el reconocimiento médico", afirmó en El Larguero, de la cadena Ser.

Las diferencias entre Gil Marín y Cerezo han llegado al punto de que los empleados de la casa hablan de dos Atléticos, con los trabajadores divididos en uno u otro bando. El resultado es un equipo que pierde a sus ases y que ahora mismo no dispone ni de entrenador, ni de director deportivo ni de patrocinador.