La policía aborta en el Caribe un envío de 500 kilos de coca a Galicia

Una operación conjunta de las policías española, búlgara y francesa ha permitido abortar el envío y posterior desembarco en Galicia de media tonelada de cocaína cuya venta iba a reportar a los narcotraficantes unos beneficios superiores a 20 millones de euros. Según la investigación, un grupo de lancheros de Vilagarcía estaban preparados para recoger el cargamento, aunque todavía se desconoce el punto exacto donde estaba prevista la descarga, probablemente en la ría de Arousa, según indicaron fuentes policiales.

El velero, con tres tripulantes de nacionalidad búlgara, fue interceptado cuando se disponía a zarpar desde la isla caribeña de Guadalupe con la cocaína a bordo que se había estibado en 14 fardos. Las investigaciones del Greco (Grupo de Respuesta al Crimen Organizado) de Galicia sobre organizaciones de narco-transportistas gallegos y la documentación falsa de nacionalidad mejicana que llevaba uno de los detenidos despertó las sospechas en la Isla de Trinidad.

Los traficantes habrían ganado 20 millones si llegan a vender la droga

La embarcación también llamó la atención de los agentes antidroga, ya que el velero había sido relacionado con anterioridad por los servicios de información extranjeros con el transporte de sustancias estupefacientes. Un dato que hace sospechar que los narcotraficantes podrían estar utilizando eventos náuticos internacionales como vía para introducir cocaína.

El velero, de 12 metros, se había inscrito como participante en una regata que se desarrolla entre Saint-Malo (Francia) y la isla de Guadalupe, tal vez como pretexto para ejecutar su plan. Con pabellón de San Vicente y las Granadinas, había recalado en el puerto deportivo de la ciudad guadalupeña de Pointe á Pitre unas semanas antes de ser capturado, desde donde había partido hacia Trinidad, punto tradicional de salida de los barcos nodriza que acuden a recibir los alijos de cocaína a la desembocadura del río Orinoco.

La operación se produce después de que en julio del pasado año fuese interceptado en Azores otro velero de bandera brasileña con casi una tonelada de cocaína. En aquella ocasión se habían encargado de recoger la droga otro grupo de transportistas arousanos que no pudieron ser detenidos.

Desde febrero de 2009, cuando fue apresado el Doña Fortuna, con casi cinco toneladas de cocaína, no se volvió a capturar otro barco. Unos días antes, el Greco de Galicia también asestó otro gran golpe en Muxía al sorprender a los lancheros en pleno desembarco de casi cuatro toneladas de cocaína en una playa. Ese año se batió un récord de incautaciones y se desmanteló el mayor grupo de transportistas de la ría que había dirigido Manuel Abal Feijoó, Patoco, ya fallecido.

En la investigación han participado agentes del Greco de Galicia y de la Brigada Central de Estupefacientes, pertenecientes a la Udyco (unidad de droga) de la Comisaría General de Policía Judicial, de las policías de Francia y Bulgaria así como de la Oficina de la DEA estadounidense en Madrid. Informaciones de esta última agencia permitieron averiguar la localización y la fecha en la que había atracado el velero en la isla de Guadalupe con droga en su interior.