El Nasdaq se retira de la puja por hacerse con la Bolsa de Nueva York
Los problemas de competencia dejan vía libre a la oferta de Fráncfort
El sueño de crear un gran mercado bursátil en EE UU se esfuma de momento. El Nasdaq y el Intercontinental Exchange han abandonado la batalla por el New York Stock Exchange (NYSE), la plaza de referencia de Wall Street, porque no tienen garantizada la luz verde del regulador.
La sociedad gestora de Fráncfort tiene así vía libre para seguir adelante en solitario con el proyecto de compra del Big Board, del que nacerá un gigante en el mercado de derivados. Y al quitarse de encima al Nasdaq como rival no tendrá tampoco que mejorar su oferta inicial, por lo que los títulos del NYSE cayeron un 10% en la apertura.
El Nasdaq puso en abril 11.300 millones de dólares (7.800 millones de euros) sobre la mesa. Y tras dos negativas de los gestores del NYSE, se disponía a ir por la vía hostil, con un ataque a los accionistas. Pero antes de emprender esa vía, entró en discusiones con el Departamento de Justicia para determinar su margen. Los gestores del Nasdaq, tras conocer la opinión del regulador, se declaran sorprendidos y decepcionados. Una opción que se le abre ahora es la fusión con el London Stock Exchange (LSE), que ya intentó sin éxito en 2007, cuando el NYSE se integró con Euronext.
Los principales bancos canadienses y fondos de pensiones formaron este fin de semana un consorcio (Maple Group) para hacerse con el control del Toronto Mercantil Exchange, para torpedear la oferta que a principios de año hizo el parqué londinense. Una maniobra que podría tumbar las aspiraciones del LSE por el mercado de derivados canadiense.
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