Pachi Vázquez, en Muxía: "El PP pone la orquesta y Feijóo la dirige"

El olor a churrasco, un clásico electoral, ya impregna la campaña del líder del PSdeG, que se estrenó ayer en Muxía en uno de esos actos con mucha carne y chorizo criollo, incondicionales a mansalva y discursos a los postres. Allí donde el Prestige dejó una mancha imborrable ya no se habla de marea negra, sino de un parador multimillonario, que el Gobierno de Zapatero aprobó en el Consejo de Ministros de la víspera, y de la Operación Orquesta, la supuesta trama de favores y adjudicaciones irregulares que tiene imputados a dos alcaldes del PP. Inversión y trama articularon el discurso de un Vázquez que contrapuso el parador que aportan los socialistas con "la orquesta que pone el PP y dirige Feijóo". Pese a la pasión gallega por la música de fiesta, nadie pasó por alto el doble sentido de la frase del secretario general.

El líder del PSdeG exige que se aclare el caso del agente electoral del PP

Dejó ahí el asunto de la presunta red corrupta en la Costa da Morte el secretario general socialista, que adornó su discurso con dos pinceladas que avanzan algunos de sus mensajes para esta campaña. Uno, en clave comarcal: la autovía Carballo-Berdoias, que el bipartito dejó adjudicada, el PP anuló y, tras un segundo concurso fallido, volverá a contratar "a la misma empresa" que ganó el primero, "solo que por 160 millones más" "Esa es la austeridad de Feijóo", concluyó. El otro recado, listo para ser repetido en ayuntamientos de perfil más bien rural, es el canon del agua: "En vez de bajar impuestos a los que menos tienen, la Xunta los castiga con un aumento del 140% por el agua de los pozos y traídas a partir del 23 de mayo".

En Muxía, ante unas 800 personas que deglutían carne en abundancia a cinco euros por persona, Vázquez llamó a lograr la mayoría absoluta, ya que en este enclave de la Costa da Morte el BNG le retiró el apoyo a Félix Porto, el alcalde del PSdeG, antes de que finalizara el mandato. Con seis concejales socialistas y otros tantos del PP, por uno del Bloque, a Porto solo le vale alcanzar el séptimo edil que le garantice un segundo mandato, tras haber puesto fin en 2007 al del popular Alberto Blanco. Porto vaticinó que el PP votará al BNG aunque solo logre un concejal para cerrarle el paso a él.

Tras hacer una parada en Ares, donde se incorporó el ministro Francisco Caamaño, la caravana de los socialistas acabó la jornada en Silleda, el municipio en el que una moción de censura del PP con tres tránsfugas del PSdeG le arrebató la alcaldía en octubre de 2009 a la socialista Paula Fernández. Y allí no se quedó la cosa en una simple alusión, como ocurrió con la Operación Orquesta en Muxía. Allí, el líder socialista se empleó con todas sus fuerzas en el discurso de la regeneración democrática. "Todos los caminos de la regeneración democrática pasan por este ayuntamiento", proclamó, para animar a recuperar el 22 de mayo "el derecho cívico esencial que les fue arrebatado a los vecinos en 2009". "Las urnas van a restituir la afrenta de Feijóo y Louzán", siguió, "porque no hay mayor transgresión de la democracia que comprar voluntades y apoyarse en tránsfugas para usurpar una alcaldía". "Que venga a Silleda a pedir perdón", retó a Feijóo.

En una plaza de la parroquia de Bandeira, Vázquez fue más allá en su discurso de la ética política. Pronto saltó a la investigación de la Xunta a Unións Agrarias, que también tocó de cerca a Silleda, y que ha provocado que un juez imputara a dos directores generales por presunta desviación de poder. "Que investigue Feijóo por qué se persiguió a Unións Agrarias", le reclamó. De paso, le animó a que indague igualmente sobre los miembros del Gobierno gallego "salpicados por la Operación Orquesta". Y, por último, que esclarezca "lo que está pasando en la Diputación de Ourense, con la denuncia de un agente electoral contratado para captar votos en Argentina".