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La oposición ve en la ley de convivencia un ataque al gallego

Pablo Linde

Cuando el Consello Consultivo tumbó la parte del Decreto do Plurilingüismo que establecía que los padres eligieran el idioma de algunas asignaturas, la Consellería de Educación se propuso darle una base legal. Lo encajó en la ley de convivencia en las aulas, presentada el pasado enero y debatida ayer en el pleno del Parlamento. Tanto PSdeG como BNG presentaron mociones a la totalidad de la norma, en la que ven -entre otros fallos- un respaldo a la disminución del gallego en las aulas.

"La verdadera motivación de ley es dar cobertura a las encuestas derivadas del decreto de gallego", reprochó el portavoz socialista de educación, Guillermo Meijón. "Los actores se quitan las máscaras. Presenta en la cámara un texto que solo ofrece ideología reaccionaria y limitadora da lengua", afirmó su homóloga nacionalista, Carme Adán.

Tanto el conselleiro, Jesús Vázquez, como el portavoz de Educación del PP, Román Rodríguez, defendieron que la ley refuerza la autoridad del profesor y trata el acoso escolar y regula asuntos como la vestimenta en las aulas. Los portavoces de la oposición recriminaron que no exite aportación presupuestaria en la ley, que no incluye partidas para mediadores de conflictos, psicólogos para los acosados o reducción del ratio de alumnos por aula.

Por otra parte, el Tribunal Superior e Xustiza de Galicia acaba de admitir a trámite un recurso contra el Decreto do Plurilingüismo presentado por STEG, según anunció ayer el sindicato en un comunicado.

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Sobre la firma

Pablo Linde
Escribe en EL PAÍS desde 2007 y está especializado en temas sanitarios y de salud. Ha cubierto la pandemia del coronavirus, escrito dos libros y ganado algunos premios en su área. Antes se dedicó varios años al periodismo local en Andalucía.

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