Alonso y la velocidad
Acabo de recorrer la distancia que hay entre Valencia y Vitoria. Ida y vuelta. Como es preceptivo, en ningún momento he superado la velocidad máxima autorizada, los 110 km/h. No me he dormido, ni me he aburrido, he disfrutado mucho durante el trayecto y, naturalmente, he tardado algo más que el año pasado, pero el viaje ha sido perfecto. Ruego a la DGT que, dado que parece ser que Fernando Alonso se duerme si viaja a 110 km/h, desautorice a dicho señor a circular por carretera, ya que representa un peligro para él y para los demás, y le haga una autorización para circular, solo, en circuitos de fórmula 1, donde podrá correr a 200, 300 o 400 km/h, si puede y sabe.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.