El alcalde de Vic exige a Duran que deje de ser líder de Unió en 2012

Unió Democràtica cerró ayer una semana convulsa a nivel interno con una nueva polémica. Josep Maria Vila d'Abadal, diputado en el Parlamento y alcalde de Vic (Barcelona), exigió al líder democristiano, Josep Antoni Duran Lleida, que abandone la dirección del partido en 2012. El año que viene está previsto que se celebre el congreso de la formación, en el que Duran, que dirige Unió desde 1982, aspira a ser reelegido presidente. "No puede ser que una persona cumpla casi treinta años al frente del partido. Va contra el pluralismo. Debe dejar paso a una nueva dirección", asegura el alcalde de Vic.

Vila d'Abadal hace un duro alegato contra Duran en una entrevista que publicó ayer el diario Ara, en la que mantiene que el partido "debe cambiar". La visión del líder de Unió sobre la independencia es la que propicia la disensión de Vila d'Abadal, que ha alzado su voz los últimos días por la posición contraria de la formación sobre las consultas populares soberanistas. Otros dirigentes del partido, como la vicepresidenta de la Generalitat, Joana Ortega, rechazaron la posición de Duran participando en la votación de Barcelona.

Vila d'Abadal cree que el partido debe apostar por el soberanismo: "Si Unió quiere ser fiel a sus ideologías originarias, debe defender la independencia", plantea el alcalde de Vic, que considera que Duran "exagera su antiindependentismo". "Ha hinchado esta posición supongo que a causa de sus amigos de Madrid. Se equivoca".

Las palabras de Vila d'Abadal se suman a la polémica que inició el propio Duran al dar a conocer el voto negativo de Ortega en la consulta soberanista de Barcelona. La revelación de Duran sentó mal en miembros del partido, también quejosos con su razonamiento: "Me ha dado la gana", respondió al ser preguntado sobre el motivo de la revelación. "Duran hace un triste favor a Ortega. El voto es secreto. Tenía que respetarla", le censura el alcalde de Vic, que antes de la consulta pidió el voto por la independencia. "Duran no puede decir que Unió no es independentista; lo debemos debatir", insiste.

Pese a alejarse de la línea oficial, Vila d'Abadal descarta, "de momento", plantar batalla al líder en el congreso de 2012. Expone que, pese a que en Unió hay "una serie de gente que piensa similar", no se ha articulado ningún movimiento crítico. Y asevera que Duran, incómodo con el independentismo, ha apartado a todos los soberanistas de la dirección democristiana.

El líder de Unió guardó ayer silencio. Aunque los viernes publica una carta a la militancia, se saltó el protocolo semanal. Fuentes de Unió explicaron que las palabras de Vila d'Abadal no tienen nada que ver con la ausencia de carta.