Ibarretxe insta a la reconciliación frente al odio para conseguir asentar la paz

El exlehendakari Juan José Ibarretxe abogó ayer por sustituir el odio y el rencor por la reconciliación, pues "sin ella la paz es sólo una tregua". Ibarretxe participó en Oñati en las quintas Jornadas de reflexión sobre prioridades éticas de nuestro tiempo, organizadas por Baketik.

Ibarretxe puso de manifiesto la importancia de diferenciar el objetivo de lograr la paz y el conflicto político y defendió la necesidad de contar con un marco de referencia ético. "Sustituir la imposición, el rencor y el odio, tantas veces magnificado hasta embellecerlo, por la reconciliación, la tolerancia y el respeto mutuo. Reconciliación, porque sin ella la paz es solo una tregua", señaló, según informó el citado centro por la paz.

En cuanto al problema político vasco, el exlehendakari apuntó la necesidad de promover una metodología democrática para su resolución. "Deben tenerse en cuenta los referentes de experiencias internacionales y la singularidad de la sociedad vasca", indicó.

Finalmente, propuso que se tenga en cuenta el papel determinante de las mujeres en los procesos de reconciliación. Ante la oportunidad abierta en el conflicto vasco, Ibarretxe consideró "crítico que las mujeres tengan una participación activa en todos los ámbitos de negociación".

Las jornadas de Batetik, a las que asistieron unas 300 personas, contaron también entre sus ponentes con el catedrático de Historia Contemporánea de la Universidad Complutense Juan Pablo Fusi, y la vocal del Consejo General del Poder Judicial Margarita Robles.

Pluralidad vasca

Fusi subrayó la importancia de la pluralidad de la sociedad vasca como uno de sus elementos constitutivos y defendió recomponer sobre esta base "la unidad interna del País Vasco, haciendo de este una sociedad con fines éticos y políticos en común". El catedrático propuso un nuevo compromiso estatutario con el Estatuto de Gernika como base que incorpore definitivamente una definición integradora del hecho vasco.

Robles destacó la necesidad de incorporar la clave del realismo a la perspectiva de un proceso de reconciliación. A su juicio, no solo hay un ámbito vasco de reconciliación, sino que esa reconciliación necesita también tener en cuenta el papel de otros actores en el ámbito del Estado, como la Justicia o los medios de comunicación.