"Estoy triste por lo del otro día"

Casillas se marchó el sábado del Bernabéu sabiendo que había perdido la Liga. Dijo que el Madrid había tirado la primera parte contra el Sporting. "Ha sido una dejadez", comentó. No era ninguna crítica a sus compañeros, matizó. Simplemente, un sentir general. Ayer se marchó con la misma cara. Triste. Derrotado. Y eso que el Madrid se acababa de merendar al Tottenham con cuatro goles. Sin sufrir. "Sí, pero en el fútbol hay una ley no escrita que dice que hay que tener respeto al rival: una jugada desafortunada o una expulsión pueden cambiar las cosas muy rápido. Vamos a ser prudentes. Yo siempre lo he sido", advirtió el capitán.

Prudente es una cosa. Marcharse sin una sonrisa, otra. "Yo estoy triste porque el otro día dejamos escapar una posibilidad para seguir en la lucha por el título de Liga. Soy un competidor y me gusta ganar. Ahora hay que ir a Bilbao e intentar recortar puntos al Barça. Luego, pensaremos en la Champions", añadió Casillas.

En la prudencia contagió a sus compañeros -solo Carvalho dio casi por hecho el pase a las semifinales-, pero no en la expresividad. Hasta Di María, que normalmente se va, cabizbajo, sin saludar a nadie, esbozó anoche una sonrisa. "Estoy contento porque pude jugar y no pasó nada grave", dijo el argentino, que llegaba tocado; "sabíamos que habíamos tenido un golpe duro el otro día y necesitábamos el apoyo de la gente. Queríamos responder con goles". "¿Se esperaban que fuera tan fácil?", se le planteó. "Es que no fue fácil... Lo que lo simplificó fue la expulsión de Crouch", apuntó.

Ramos también consideró las dos tarjetas amarillas a Crouch como claves. "Es cierto que esa jugada fue determinante, pero tampoco hay que quitar mérito al partido tan serio que hemos hecho. Hemos tenido las ideas muy claras", dijo. Tan claras que hasta se le olvidó -a él como a Di María, Carvalho y Cristiano- forzar una amonestación. Los cuatro, junto a Pepe, estaban apercibidos de sanción. "Con la que se lio la última vez, para forzar amarillas... No lo pensé. Me limité a disfrutar del partido", bromeó.

El Madrid viajará a Londres el próximo martes para sellar el pase a la semifinal. A Casillas le recordaron que en las dos últimas Copas de Europa ganadas la Liga también estaba perdida. ¿Similitudes? "Puede ser, pero en las anteriores finales creo que dependíamos de ellas para estar en Europa el año siguiente. Aun así, vamos a esperar...", se despidió. Sin recuperar la sonrisa.