Cuatro acusados de atentar contra el SIVE por orden de narcotraficantes
El titular del Juzgado de Instrucción número 3 de La Línea de la Concepción (Cádiz) ordenó ayer el ingreso en prisión preventiva de cuatro vecinos de la localidad, de entre 30 y 40 años, acusados de un presunto delito de daños en instalaciones militares.
Tras ser interrogados, fuentes próximas a la investigación relacionan este hecho con alguna una red organizada de narcotraficantes en la zona del Campo de Gibraltar, que podría haber acordado pagar a los detenidos por llevar a cabo el sabotaje de la torre de vigilancia del Sistema de Vigilancia.
Los detenidos intentaron quemar dispositivos del SIVE (Sistema Integrado de Vigilancia Exterior) en la zona de Sierra Carbonera, en San Roque, durante el pasado fin de semana.
El juez mantiene el secreto del sumario y abierta la investigación. No se descartan nuevas detenciones. La Guardia Civil informó ayer de que "los presuntos autores del delito no llegaron a causar daños en las torretas de vigilancia en las que se encuentran las cámaras del SIVE".
Los cuatro acusados causaron daños en la alambrada que rodea el recinto militar.
Otros sabotajes
Este sistema, implantado por el Ministerio del Interior en toda la costa andaluza y que detecta cualquier movimiento en el mar, se ha convertido en el peor enemigo de los narcotraficantes en el área del estrecho de Gibraltar y, por lo tanto, objeto de varios intentos de sabotaje.
El 18 de octubre de 2007, la misma torre de vigilancia atacada el pasado fin de semana sufrió un incendio intencionado. No hubo detenciones, pero las investigaciones apuntaron a una organización de Europa del Este como posible responsable de los daños causados.
Fuentes de la Asociación Unificada de la Guardia Civil confirmaron ayer que, en el litoral de la provincia de Málaga, los radares y cámaras del SIVE han sufrido al menos, tres ataques.
La Guardia Civil ha conseguido imputar por daños a cinco personas que, en el momento de su detención, fueron sorprendidos en mitad de la noche con garrafas de gasolina para prender fuego a las estaciones de vigilancia.
