"Trato de dar pausa al Manchester City"

El pasado verano, David Silva llegó a Sudáfrica como jugador del Valencia y a los pocos días firmó por el Manchester City. Empezó el Mundial de titular y no volvió a jugar más que unos pocos minutos, pero no se quejó. Nacido en Arguineguín, un pequeño pueblo de Gran Canaria, hace 25 años, lleva 45 partidos con la selección y una carrera singular. Creció en la cantera del Valencia y se ganó un sitio entre los mejores tras ser cedido al Eibar y el Celta.

Pregunta. ¿Por qué se fue del Valencia?

Respuesta. Porque lo necesitó el club. La vida... Yo estaba muy bien y no me habría ido, pero la situación del club lo exigía. Fue una gran inyección de dinero y le vino bien. Mi vida siempre ha sido ir peldaño a peldaño. Supongo que me tocaba subir otro.

"Los británicos son muy divertidos. Es increíble la pasión con la que viven el fútbol"

"A Luis le parecía muy aguerrido y me decía: "Usted no es canario, es vasco"

P. ¿Y por qué al Manchester City?

R. Porque mostró un gran interés... Yo quería hacerlo rápido y no darle muchas vueltas. Era una oferta muy interesante, un buen club, y no tuve que pensarlo demasiado. Todos se pusieron de acuerdo. Estoy muy contento.

P. ¿Cómo es el jeque Mansour bin Zayed, el dueño del club?

R. No lo sé. No le he visto nunca ni he hablado con él

P. Si tuviera que definir su vida en Manchester, ¿cómo lo haría?

R. Muchos partidos, mucha tranquilidad. Mi vida en Manchester es muy tranquila. Bueno, yo vivo a las afueras. Así que el poco tiempo que me queda fuera del fútbol lo dedico a estar en casa y pasear por el pueblito. Lo más complicado de la adaptación ha sido el frío, unas temperaturas muy diferentes a las de Valencia... Por lo demás, estoy muy bien, muy cómodo.

P. ¿Nota que le tratan como a un campeón del mundo? ¿Cree que ahora se respeta más a los jugadores españoles?

R. No; soy una persona y me valoran como tal. Yo no juzgo a nadie por lo que es o por lo que tiene, sino por cómo es como persona. Así me tratan a mí, como a una persona.

P. ¿Qué es lo que más le ha impactado de vivir en Reino Unido?

R. La tranquilidad. Es increíble. Y la pasión con la que viven el futbol. Es magnífico. Los británicos son muy divertidos. Al principio, solo hablaba con los jugadores latinos y con Touré, que habla castellano, pero ahora ya voy pillando más el idioma y me llevo muy bien con los ingleses, con todos...

P. Benítez obligaba a hablar en inglés dentro del vestuario. ¿Qué dice sobre esto Mancini?

R. Nada. Nos deja hablar como nos parezca.

P. ¿Cómo pretende que jueguen?

R. Bueno, estamos en una fase de transición. Poco a poco, está cambiando el estilo. Llegamos muchos jugadores nuevos, así que se necesita un tiempo para que nos adaptemos. Pero es un hombre de carácter, tiene las cosas claras y, como es muy competitivo, quiere que el equipo lo sea. Cada vez elaboramos más el juego porque tenemos gente de toque y somos capaces. La meta es formar un equipo ganador.

P. ¿Qué le pide el entrenador?

R. Que juegue como lo hacía antes. Me costó mucho el primer mes porque no hice la pretemporada y no tenía el fondo físico adecuado. La Premier, en ese sentido, es muy exigente y yo no estaba a la altura. Me da mucha libertad y mucha confianza. Defensivamente, hay que trabajar, pero eso ya lo hacía en el Valencia. Mancini me ha dado mucha confianza.

P. ¿Le recuerda a algún entrenador que haya tenido?

R. No, y he tenido muchos y muy buenos.

P. ¿Trabaja de una manera diferente a como se hace en España?

R. No; es muy similar, muy parecido.

P. ¿Es muy distinto el juego?

R. Es más rápido. No hay tanta posición. Tienes que hacer las cosas más rápidamente porque no te dejan opción. No tienes mucho tiempo para pensar, así que no hay mucha pausa. Eso es lo que yo trato de aportar. Porque hay momentos del partido que piden calma, tener la pelota. No llegar tan rápido. Trato de dar eso, un poco de pausa

P. Empezó el Mundial siendo titular, lo acabó de suplente y desde el amistoso en Argentina no es titular. ¿Cómo lo lleva?

R. Bien, yo estoy contento. No pregunto cuando juego y no lo hago cuando no juego. Yo estoy contento de venir a la selección. Lo hago con la máxima ilusión. Es un premio y siempre espero jugar, pero hay mucha competencia y entiendo que el seleccionador prefiera a otro. Llevo 45 partidos y he sido titular muchas veces. Estoy contento. Me siento importante desde que el seleccionador me llama. Me siento muy partícipe de los éxitos de la selección y he metido bastantes goles. Estoy contento porque tengo la sensación de que, cuando me han dado la oportunidad de jugar, he aportado cosas. Y eso espero seguir haciendo. Si es posible, mañana mismo.

P. ¿Por qué le está costando tanto a España sacar los partidos adelante últimamente?

R. No es de ahora, yo creo que desde la Eurocopa. Los rivales se cierran mucho y no es fácil.

P. ¿Cuesta mentalizarse para partidos como el de mañana ante Lituania?

R. No, cuando vienes a la selección, el estímulo es enorme.

P. ¿Quién le dijo: "Usted no es canario, es vasco"?.

R. Luis Aragonés. Me lo decía porque le parecía muy aguerrido.