El PSOE descarta adoptar medidas disciplinarias contra Fernández

El PSOE andaluz esperaba desde hace semanas el aviso de imputación del exconsejero de Empleo en el caso de los ERE. En consecuencia, la respuesta ha sido de manual: "Cuando a alguien lo llaman en diligencias previas, se trata de una garantía procesal; Antonio Fernández podrá demostrar su inocencia, y, en cualquier caso, el partido respeta la acción de la justicia". Estas fueron las palabras de la secretaria de Organización de los socialistas andaluces, Susana Díaz, quien anunció que la dirección descarta tomar medidas disciplinarias.

No obstante, Díaz insistió en la idea de que el PSOE no va a pasar nada por alto, que regirá la tolerancia cero y será "implacable" contra quienes estén implicados en las irregularidades.

Respecto a la posibilidad de que el predecesor de Fernández en Empleo, José Antonio Viera (senador y secretario del PSOE de Sevilla), resulte también imputado, la dirigente socialista señaló de corrido y elevando la voz: "Viera es un hombre honesto y honrado, con una trayectoria política y personal que lo avalan, y no tiene nada que temer, ni él ni el partido, y tienen todo el respaldo total de sus compañeros de Sevilla y Andalucía". Cuando se le emplazó repetir el mismo enunciado aplicado a Fernández y con similar énfasis, Susana Díaz se limitó a decir que el exconsejero va a tener la oportunidad de demostrar su inocencia.

En general, la reacción de los cargos socialistas a la imputación de Fernández fue bastante discreta y ponderada. Algunos opinan que incluso cautelosa y fría. Con la salvedad del titular de Gobernación, Luis Pizarro, quien dijo abiertamente que el exconsejero es muy amigo suyo y está "absolutamente convencido de su inocencia". También expresó su apoyo cerrado la ejecutiva del PSOE gaditano, que dirige Francisco González Cabaña.

Aunque ayer no se celebró reunión de la ejecutiva, por la sede pasaron el líder del partido y presidente de la Junta, José Antonio Griñán, y su consejera de la Presidencia, Mar Moreno.

Por la tarde la cúpula andaluza se desplazó a Madrid para mantener un encuentro con el secretario de Organización federal, Marcelino Iglesias, y otros dirigentes nacionales. Fuentes del PSOE andaluz informaron de que el motivo de la reunión era hacer un análisis de situación y explicar a la dirección federal la investigación interna que ha hecho la Junta, y que se da ya por concluida. Por la parte andaluza estuvieron Mar Moreno, Susana Díaz, el portavoz parlamentario, Mario Jiménez; y el consejero de Empleo, Manuel Recio.

Las mismas fuentes señalaron que se tomaron algunas decisiones que se verán los próximos días, aunque no precisaron su contenido. Además, aseguraron que el grado de determinación del partido en la defensa de los dos exconsejeros es igual, más allá de "las simpatías personales de cada uno". "Lo que ocurre es que la imputación ha sido de Antonio Fernández".