La Rosaleda, contra Pellegrini
Osasuna, que no ganaba fuera desde hace 13 meses, devuelve al Málaga a la cola
Un Málaga divorciado de la fortuna y con aire ya de Segunda fue apuntillado en La Rosaleda por Osasuna, un rival directo que dio un paso de gigante hacia la tranquilidad tras su primera victoria liguera fuera de Pamplona desde enero de 2010. Justamente después de que el cuarto árbitro levantara la tablilla con los cuatro minutos de descuento, Sergio Fernández bombeó de cabeza el balón a la escuadra local y Caballero no pudo atajarlo. El gol, al saque de un córner -10 de los 59 goles que ha encajado el Málaga en esta Liga han sido a balón parado- tuvo como preludio un disparo al palo de Lolo.
Mendilibar demostró que viajó a la Costa del Sol con el partido bien estudiado. Lolo y Sergio, muy centrados, propiciaron que el goleador local, Rondón, firmara su peor encuentro esta temporada. El venezolano estuvo prácticamente desaparecido y cuando cogía el balón era para ensimismarse con él. Además, Puñal y Nekounam hicieron del centro del campo su feudo y anularon a Maresca y Recio.
MÁLAGA 0 - OSASUNA 1
Málaga: Caballero; Gámez (Manu Torres, m. 42), Demichelis, Weligton, Eliseu; Recio, Apoño, Maresca (Portillo, m. 56), Quincy; Seba (Juanmi, m. 80) y Rondón. No utilizados: Arnau; Kris, S. Silva y Camacho.
Osasuna: Ricardo; Damiá, Lolo, Sergio, Nelson; Soriano (Vadocz, m. 89), Puñal, Nokouman, Cejudo (Masoud, m. 70); Sola (Aranda, m. 60) y Camuñas. No utilizados: Riesgo; Flaño, Leka y Calleja.
Gol: 0-1. M. 90. Sergio, de cabeza.
Árbitro: Muñiz. Amonestó a Cejudo, Soriano, Sola, Puñal, Sergio y Demichelis.
25.000 espectadores en La Rosaleda.
Con todo, el Málaga de los presuntos titulares, que tuvo a Demichelis como su mejor jugador, puede achacar parte de la derrota a la mala suerte. Seba Fernández -pura casta en pequeño envase- falló dos goles cantados en la segunda parte y Gámez, un dos de manual que, hoy por hoy, es el mejor extremo del Málaga, se lesionó antes del descanso.
Al final del partido, media grada se convirtió en un vendaval de silbidos contra Pellegrini. La otra media, todavía ultrajada por cómo regaló el 7-0 el pasado jueves al Madrid, desertó.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.