Golpe de efecto
El Valencia cobra ánimos para su cita europea con el Schalke imponiéndose al Mallorca con dos goles de Pablo
El Valencia se sacó la espinita que suponían sus desastrosas actuaciones recientes frente al Mallorca. Con dos goles de Pablo Hernández, el equipo de Emery remontó un resultado adverso y puso fin a una racha de dos derrotas consecutivas en Palma y una tercera encajada esta temporada en el enfrentamiento de la primera vuelta en Mestalla.
Se ve buen fútbol últimamente en Son Moix, donde la afición fue selectiva al recibir a dos exmallorquinistas: aplausos para Aduriz y pitos para David Navarro. Contrariamente a lo que acostumbra en casa, el Mallorca cedió la iniciativa al rival y apostó sus números a las recuperaciones rápidas del balón y a la velocidad de Nsue, devuelto a la banda derecha. Fueron los de Laudrup quienes aparecieron con mayor peligro durante una primera mitad entretenida, en la que el Valencia no logró imponer su ritmo. Nsue y Castro conectaron con un activo Webó, que no acertó a la hora de los remates, pero forzó un penalti en la disputa de un balón dividido con Ricardo Costa. Guaita se tiró al lado correcto, pero Ramis colocó la pelota con fuerza y muy arriba.
MALLORCA 1 - VALENCIA 2
Mallorca: Aouate; Cendrós, Nunes, Ramis, Kevin; Nsue, Martí (Tejera, m. 81), De Guzmán (João Víctor, m. 84) Pereira (Aki, m. 64); Castro y Webó. No utilizados: Lux; Corrales, Rubén y Sergi.
Valencia: Guaita; Bruno, Ricardo Costa, David Navarro, Jordi Alba; Pablo Hernández, Topal, Mata (Vicente, m. 80); Banega (Albelda, m. 87), Jonas (Joaquín, m. 70) y Aduriz. No utilizados: César; Stankevicius, Mathieu y Soldado.
Goles: 1-0. M. 30. Ramis, de penalti. 1-1. M. 32. Pablo Hernández, de disparo raso desde la línea frontal del área. 1-2. M. 55. Pablo Hernández, a pase de Jonas.
Árbitro: Undiano Mallenco. Amonestó a Webó y Ramis.
14.155 espectadores en el Iberostar Estadi.
Los de Emery ponen fin a una racha adversa ante el cuadro balear
Replicó el Valencia en la siguiente jugada desplegando el manual del fútbol directo: un pase largo de Topal que Aduriz bajó de cabeza en la frontal para que Pablo Hernández enchufara un disparo raso y potente, imposible para Aouate. Más allá del mérito del autor del gol, la jugada definió a la perfección la importancia de un delantero como Aduriz. El vasco, recuperado en 12 días de una lesión con pronóstico de cuatro semanas, respondió con una acción marca de la casa a la confianza depositada en él por Emery.
Tras el descanso, una gran intervención de Guaita desbarató un remate a bocajarro de Nsue. A partir de ahí se diluyó el Mallorca. El cuadro balear acabó echando el bofe tras la pelota, víctima del plan de Emery, que desplegó y avanzó a los laterales para hacer útil hasta el último metro del campo. El Valencia encadenó posesiones larguísimas y no tuvo problemas para generar espacios en el interior. Ahí apareció Jonas, que envió el balón en diagonal para que de nuevo Pablo, esta vez con la zurda, lo ajustara al palo corto.
El guion del partido estaba escrito y tan solo admitió cierto suspense en el desenlace. Con el Mallorca descolgándose por momentos, Laudrup buscó la reacción en la electricidad del japonés Aki y la visión ofensiva de Tejera, dos suplentes habituales que venían de cuajar una buena actuación en Cornellà-El Prat, frente al Espanyol. Ambos reivindicaron su valía en el arreón final, pero se dieron de bruces con las manoplas de Guaita.
El triunfo consolida al Valencia en la tercera plaza, como "líder de la Liga de 18 equipos", según la bautizó esta semana Laudrup. Emery, mucho más satisfecho que en sus últimas visitas a la isla, llamó a los suyos a filas: "Ahora tenemos cuatro días para pensar única y exclusivamente en el examen de Alemania". El próximo miércoles, el Valencia se juega su futuro en la Champions frente al Schalke de Raúl con la misión de remontar el 1-1 de la ida.
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