Hereu dice que solo él "garantiza" la unidad socialista en Barcelona

Sumar o restar. Esa lógica aritmética en que se ha movido el debate de las primarias socialistas por el Ayuntamiento de Barcelona tuvo ayer un nuevo episodio. El alcalde Jordi Hereu pidió a través de una carta el voto a los militantes y acusó implicitamente a la otra candidata, Montserrat Tura, de fomentar la división entre las filas socialistas.

"No tenemos por qué dividir, podemos sumar fuerzas. Y eso solo lo garantiza mi proyecto", dice la misiva, dirigida a los 3.400 militantes del PSC en Barcelona. Ellos, junto a los 8.617 simpatizantes del partido, tendrán que elegir el sábado entre el alcalde o Tura para encabezar la lista al Ayuntamiento.

Hereu recalcó que su candidatura es "la que tiene voluntad de unir fuerzas" y aprovecha para pedirle a la ex consejera una vez más que "lo deje todo por Barcelona". En repetidas ocasiones, el alcalde la ha invitado para que sea la número dos de la lista que se enfrentará a Xavier Trias (CiU). Ella ha rechazado la propuesta, alegando que el alcalde se ha negado a hacer lo mismo. Hereu dice que si pierde "se va a casa".

Por su parte, para terciar en la discusión, Trias afirmó en un desayuno en Madrid que Tura es una "persona instigada por otros" y que preferiría enfrentarse en las urnas con el actual alcalde. Según los últimos sondeos, si el rival es Hereu, CiU rozaría la mayoría absoluta en el Ayuntamiento. Con Tura, empatarían.

En uno de los pocos puntos en los que han coincidido ambas campañas es en rechazar que el recuento de votos se haga en la sede del PSC en la calle de Nicaragua. La Federación de Barcelona anunció que la noche electoral se realizará en el Palace Hotel.