Doble rasero

El autor aborda con rigor y amenidad la Gran Recesión en la que nos encontramos. Piper aporta una visión ajustada sobre cómo esta crisis ha dislocado la economía mundial, pero también sobre cómo afecta a la gente normal, con casos concretos de los dos mundos: el de Wall Street, el de las finanzas y los grandes negocios, y el de Main Street, esto es, el de la mayoría de la población. Relata cómo una serie de hechos, a primera vista insignificantes, han dado lugar a la mayor depresión vivida desde hace más de dos generaciones. Estados Unidos sigue siendo la potencia económica del siglo XXI, pero ya no puede superar sus problemas en solitario.

En un capítulo final, Sobrevivir no es suficiente, Piper analiza la situación española y se refiere a las bancarrotas nacionales de Felipe II como precedente remoto de la actual crisis.

Una solución aparentemente sencilla para afrontar la Gran Recesión sería que Grecia, España y Portugal renunciasen al euro. Los dracmas, las pesetas y los escudos reintroducidos se depreciarían -los economistas estiman realista una devaluación del 40%-, con lo cual sus economías serían de golpe más competitivas y podrían tratar de recuperarse con exportaciones. Sin embargo, esto conllevaría casi inevitablemente una bancarrota. Al menor indicio de una salida de la eurozona, los mercados se anticiparían a la potencial devaluación y los gastos de financiación de la deuda se dispararían.

Piper pone un punto de esperanza y sintetiza en tres elementos la solución: solidez, solidaridad y crecimiento.