Reino Unido prepara una profunda reforma de los contenidos escolares
Los conservadores planean una enseñanza más clásica y con menos materias
El nuevo Gobierno británico ha abierto un debate para reformar la actual estructura del currículo educativo que se aplica en Inglaterra y Gales. El ministro de Educación, el conservador Michael Gove, ha abogado por un retorno a la enseñanza de "los hechos", en contraste con la evolución de la educación en el último medio siglo como una herramienta que pone sobre todo énfasis en enseñar a pensar, más que a transmitir conocimientos enciclopédicos. Sus propuestas han sido acogidas con escepticismo por los educadores y por la oposición laborista, que ve en ellas un retorno a los sistemas educativos del pasado.
La reflexión sobre la reforma será conducida por el Ministerio de Educación en consulta con un panel de cinco expertos liderado por Tim Oates, director de Evaluación, Investigación y Desarrollo de Cambridge Assessment, con el objetivo de que entre en vigor en dos fases, en 2013 y 2014.
Lengua, Ciencias, Matemáticas y Educación Física son intocables
Los docentes dicen que pretende volver a la educación de los años cincuenta
Gove quiere reducir de forma drástica la panoplia de 14 materias obligatorias (13, para los alumnos de entre cinco y siete años), aunque ha adelantado que la educación ha de girar en torno a asignaturas que con seguridad seguirán siendo obligatorias: Lengua, Matemáticas y Ciencias, además de Educación Física. Religión se considera "estatutaria", es decir que los centros tienen la obligación de ofrecerla, pero los padres pueden optar por eximir de ella a sus hijos.
También adelantó la posibilidad de que el estudio de Lenguas Extranjeras Modernas vuelva a ser obligatorio para los alumnos de entre 14 y 16 años, después de que cayeran en picado el número de estudiantes desde que en 2004 se convirtió en una materia optativa.
El resto de asignaturas que conforman el actual currículo son Arte y Diseño; Ciudadanía; Diseño y Tecnología; Geografía; Historia; Información y Tecnologías de la Comunicación; Música; y Educación Personal, Social y Sanitaria. Educación tiene la intentención de repensar cuáles de ellas deben seguir siendo obligatorias y a qué edades.
"No voy a dar una lista de materias obligatorias, pero creo que tenemos que ceñirnos a los hechos", ha defendido Gove al comentar el lanzamiento de la reforma. "Quiero decir que tenemos que tener hechos en el currículo; hechos, conocimiento", explicó. Y en un artículo publicado en The Daily Telegraph puso como ejemplo de esa ausencia de hechos el dato de que las dos únicas figuras citadas en el currículo de Historia son los abolicionista de la esclavitud William Wilberforce y Olaudah Equiano, en perjuicio de personajes como Winston Churchill, Florence Nightingale y Horatio Nelson. Aseguró también que "en el currículo de Geografía el único país que mencionamos es Reino Unido: no hay ni una sola mención a otro país, continente, río o ciudad".
Gove echó mano de los datos del informe PISA de la OCDE presentado el mes pasado -que mide los coniocimientos de los alumnos de 15 años de 60 páises, precisamente, en lectura, matemáticas y ciencias-, en el que Reino Unido ha bajado puestos. Así puso como ejemplo a los estudiantes chinos de matemáticas de 15 años (Hong Kong y Sahangái están a la cabeza de PISA) llevan dos años de ventaja a los estudiantes ingleses de su misma edad. Y defendió la necesidad de que los niños británicos "adquieran un núcleo esencial de conocimiento" para no quedar "culturalmente empobrecidos".
A la luz de las declaraciones de Gove, la secretaria general de la Asociación Nacional de Maestros de Escuela/Sindicato de Mujeres Profesoras, Chris Keates, opinó en la BBC que el debate sobre la reforma del currículo "carece de sentido" porque el Gobierno "ya ha determinado que los niños han de tener un currículo como el de los años cincuenta". Para Russell Hobby, de la Asociación Nacional de Directores de Escuela, los directores quieren un currículo menos preceptivo "que incluya lo básico pero al mismo tiempo deje margen a la creatividad, la cultura y la emoción". Brian Lightman, de la Asociación de Líderes de Escuelas y Colegios, opina que no se trata tanto de transferir conocimientos a los niños como de las habilidades que aprenden y las experiencias que viven. En síntesis, el debate parece girar en torno a qué es más importante: ¿acumular saber o aprender a pensar?
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