'Gángster' por error

Gregory Coupet, que fue compañero suyo en el Lyón, lamentó que el rostro de Karim Benzema reflejase prematuramente la frustración y el matonismo de sus ídolos raperos: "Me da lástima verle porque es un gran tío. Pero con solo 20 años ya va por la vida con la actitud de un gángster".

Coupet solo juzgaba la imagen. Porque debajo del aspecto de pandillero Benzema escondía, parafraseando a José Mourinho, "un gato". Un gato doméstico, además. Un gato persa. Perezoso y regalón. Una criatura que, lejos de inspirar el aprecio del entrenador, lo que ha provocado es una especie de repugnancia contagiosa. Un rechazo que incluso arraiga en los espíritus más piadosos del vestuario, como el de Kaká, que el viernes le lanzó la crítica más directa que ha formulado un jugador de la actual plantilla del Madrid sobre un compañero: "Benzema podría hacer más, pero se va de los partidos".

El delantero francés solo ha conseguido en la Liga un gol tras 28 remates

"Si fuera un mal jugador no le pediríamos un poquito más de ambición"

Siempre hubo jugadores que despiertan prejuicios. A unos, como a Kaká, les multiplicaron los méritos. A otros, como a Benzema, no les reconocieron los suyos. Benzema, que costó 35 millones de euros, posee tantas condiciones y las desaprovecha con tanta indolencia que sus actuaciones conducen a engaño. Parece vago pero según las mediciones de la UEFA en Liga de Campeones recorre más kilómetros que Cristiano Ronaldo. El último encuentro de Champions que jugaron juntos como titulares, contra el Auxerre en el Bernabéu, no fue una excepción. Hizo 10.160 metros, más de dos kilómetros que Cristiano, que se quedó en 7.483.

A Mourinho y a Kaká les parece que Benzema no es lo suficientemente agresivo en el área pero en la primera mitad de la temporada pasada metió cinco goles. Dos más que Kaká en el mismo periodo, coincidiendo con los meses en los que Kaká se encontró mejor físicamente.

Otro prejuicio relacionado con Benzema es que Manuel Pellegrini, el ex entrenador, le hundió porque no le dio suficientes oportunidades. Esto es lo que piensa el presidente del Madrid, Florentino Pérez. Para remediar la situación, entre otras muchas cosas, el presidente fichó a Mourinho. Pero al cabo de la primera ronda de la Liga las estadísticas dicen que Benzema fue titular 12 veces con Pellegrini en las 19 primeras jornadas de la Liga pasada, mientras que Mourinho le ha permitido jugar solo seis encuentros desde el inicio.

"Lo que ha dicho Kaká es lo que pensamos todos", dijo ayer Mourinho, muy vehemente al asegurar que una crítica pública a un compañero no implica necesariamente un acto destructivo. "Y es lo que piensa también Karim. ¿No?". Para Mourinho, Benzema es un problema táctico y estratégico, por no hablar de las tensiones con el club que le genera el tema. La falta de gol es su defecto principal y Mourinho lo asocia al carácter, que no es entrenable. Como dijo Carlos Bianchi de Fernando Torres: "No tiene gol y los goleadores no se hacen. Los goleadores nacen".

Bianchi se equivocó con Torres y Mourinho hace cuentas para no equivocar su juicio: cree que en seis partidos como titular y 765 minutos de juego en Liga su delantero debería haber conseguido algo más que tres asistencias, 28 remates y un gol. El porcentaje de acierto, el 4%, es excesivamente bajo para un punta. Y a esto se aferró ayer Mourinho para justificar a Kaká: "¡Karim tiene que dar un poquito más! Es un chico fantástico, de quien se decía que no se comunicaba, que solo hablaba francés con los franceses... Todo mentira. Pero por su calidad esperamos un poquito más de él. Es un chico que juega en el campeonato, que es titular desde que Higuaín se quedó fuera del partido de Barcelona... Siempre de un modo muy positivo, muy esforzado, trabajando mucho más para el equipo, jugando bien, asistiendo bien... Encuentras tantos goles de Cristiano y de otros, como Granero en Almería en los que Karim tiene un papel importante... Pero después ves que tiene menos goles en la Liga que Sergio Ramos [un gol en 1.400 minutos] y Ricardo Carvalho

[dos goles en 1.400 minutos]. ¡Queremos un poco más! Es normal. Si fuera un jugador malo no estaríamos todo el tiempo hablando de él ni le pediríamos un poquito más de ambición, ni un poquito más de este instinto del matador del área".

Mourinho quiere despertar al cazador que lleva dentro, pero Benzema, a quien Coupet confundió con un gángster, no mata una mosca.