La destrucción de empleo se acerca a los niveles más graves de la crisis

Los últimos datos del Eustat sobre población activa en el País Vasco, referidos al cuarto trimestre de 2010, resultan tan demoledores como discordantes con otros indicadores económicos y de empleo que apuntaban hacia un inicio de la recuperación. Según la estimación del Instituto Vasco de Estadística, dada a conocer ayer, entre octubre y diciembre del año pasado se destruyeron en Euskadi un total de 17.900 puestos de trabajo, una cifra solo superada por el descenso en 21.500 empleos registrado en el primer trimestre de 2009, en lo más crudfo de la crisis. También resulta preocupante el aumento de la tasa del paro en un 1,2% hasta llegar al 10%.

La encuesta de Población en Relación con la Actividad (PRA) supone un mazazo que da al traste con los signos de mejoría que venían observándose durante el año. En los dos trimestres anteriores, el número de empleados se había incrementado notablemente. La destrucción de la citada cifra de empleos afecta principalmente a los hombres (11.300 menos) y se concentra en el sector servicios, que pierde 12.300 puestos netos. En la construcción caen 4.300 y otros 2.000 en la industria. Solo mejora la agricultura, que gana 700. Con este acusado descenso, Euskadi cerró el ejercicio con 942.100 personas ocupadas.

13.800 personas se sumaron el año pasado a la cifra de desempleados

Como consecuencia de ello, la tasa de actividad se queda en el 55,9%. Resulta muy significativa la destrucción, en apenas tres meses, de 23.400 contratos indefinidos en toda la comunidad autónoma. En cambio, aumenta en 1.000 personas la cifra de asalariados con contrato temporal (incluyendo aquellos sin contrato) y crece en 4.600 el cómputo de trabajadores no asalariados.

Para obtener estos datos de esta encuesta, el Eustat realiza un trabajo de campo sobre una muestra de 5.000 familias y renueva a al menos una octava parte de los encuestados cada trimestre. El organismo oficial de estadística estima que una tercera parte de los 838.100 hogares vascos no cuentan con ninguna persona activa. En el cuarto trimestre del año pasado, 4.100 familias pasaron a engrosar la lista de 32.300 hogares con todos sus miembros en el paro (un 3,9% del total).

Los datos del desempleo también se torcieron en el mismo periodo. Al cierre de 2010, el número de personas que buscan un empleo activamente y están disponibles para trabajar asciende a 104.200. En el último trimestre esa cifra aumentó en 11.700 con respecto al mismo periodo anterior.

Por territorios, el mayor incremento en el número de parados se dio en Guipúzcoa, con 6.900 personas. Esta cantidad sorprende frente a la registrada en una provincia como Vizcaya, que le dobla en población y donde el número de afectados creció en 3.500. En Álava, el paro subió en 1.400 personas.

Los últimos datos ofrecen una tasa de paro del 10%, 1,2 puntos porcentuales más que en el trimestre anterior, un índice que se mantiene aún cerca del nivel existente en el conjunto de la UE (el 9,6%), segun datos del Eurostat, y a una distancia muy favorable de los ratios que presenta el resto de España (20,6% de paro).

Tras el hundimiento registrado en el tramo final del pasado ejercicio, el balance del empleo en el País Vasco durante 2010 presenta una situación global claramente negativa, con una pérdida de 9.100 empleos netos y un aumento del 1,3% de la tasa de paro. De este modo, 13.800 personas más se añadieron a la situación de desempleo en comparación con los datos finales registrados en 2009.