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Mar dejó de gastar 53 millones de euros de fondos de la UE y estatales

El aplazamiento de las inversiones hace peligrar ayudas que expiran en 2013

Ayudas para la flota por el amarre durante los temporales, 639.087 euros; subvenciones a la acuicultura, 31,3 millones; fondos para la pesca artesanal, 1.386.200 euros; dinero para planes piloto relacionados con la pesca, 1,1 millones de euros. Y así hasta sumar 53.496.515 euros de fondos europeos y del Estado que la Consellería do Mar dejó sin gastar en 2010 y que decidió reprogramar para ejercicios posteriores. Con el riesgo de que en 2013, según prevé la Comisión Europea, expiren esas ayudas comunitarias y Galicia acabe perdiendo partidas millonarias de tanto aplazar programas y de proseguir esta huida hacia adelante.

La Consellería de Mar admite que esos 53 millones de euros corresponden a "capítulos que no agotaron el dinero disponible durante 2010", pero niega que la comunidad pueda perder los fondos que decidió postergar hasta el período 2011-2013. Fuentes de este departamento explicaron ayer a EL PAÍS que " la normativa comunitaria permite que se financien y paguen proyectos hasta finales de 2015". Reconocen eso sí, que dichas inversiones deberán ir con cargo a las ayudas previstas hasta 2013.

Partidas para equipar puertos y para zonas costeras quedaron sin gastar

En plena crisis económica, el departamento de Rosa Quintana dejó sin invertir el año pasado el equivalente a la cuarta parte de su presupuesto anual en subvenciones y ayudas que ya tenía concedidas de la Unión Europea o que debía transferir el Estado. Según consta en el expediente de baja de crédito tramitado por la cartera de Rosa Quintana el 26 de noviembre de 2010 y que lleva el aval del director general de Orzamentos, la Xunta devuelve, a la espera de que le sean reasignados en posteriores ejercicios, más de 53 millones de euros.

Cabría descontar de ahí dos millones de euros presupuestados para indemnizar a la flota del bocarte que finalmente sí pudo pescar durante este año y no tiene derecho a compensaciones. Hecha esta salvedad, la renuncia afecta a 15 capítulos más que engloban prácticamente todas las competencias de Mar.

Desde las partidas para transformación de buques, hasta las que debían fomentar el desarrollo sostenible de las zonas costeras, la protección de la flora y fauna acuáticas o los proyectos de gestión integral de los recursos marinos. Al solicitar la baja, en cada epígrafe el Gobierno gallego esgrime una explicación.

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De todos los capítulos, el más relevante es el de las ayudas a la acuicultura y cultivos marinos, dotado con 31,3 millones de euros. La Xunta no pudo invertir ese dinero en un sector clave porque, tras anular el del bipartito, todavía no ha dado luz verde a un nuevo plan de acuicultura que según la consellería debía estar listo en 2010. Mar argumenta en su renuncia que "existen remanentes de crédito de ejercicios anteriores que se vienen incorporando" y admite que "la ejecución presupuestaria es baja debido a no estar en marcha el plan de acuicultura, a lo que se añade que las grandes empresas no pueden acceder a las ayudas, lo que provoca la existencia de estos remanentes" que se proponen dar de baja. El departamento de Rosa Quintana avanza que aprobará inicialmente el plan de acuicultura en febrero y calcula que podrá estar en vigor durante este primer semestre.

O lo que es lo mismo, admite una nueva demora, después de que el retraso en el plan acuícola del bipartito fuese un argumento recurrente del PP, que en campaña se comprometía a agilizar la tramitación de un nuevo documento que contribuyese a "recuperar el liderazgo mundial de Galicia en la acuicultura".

Menos explicación tiene la renuncia de la Xunta en el actual contexto de crisis económica -que lleva a su presidente, Alberto Núñez Feijóo, a quejarse a diario de la estrechez de su Presupuesto- a una partida de 8,1 millones de euros para el desarrollo sostenible de zonas pesqueras. Mar admite el fracaso de la orden que aprobó para sufragar este tipo de proyectos. En 2010 también se han dejado de invertir 3,3 millones para equipamiento de puertos pesqueros. La consellería descarta estos fondos porque para ejecutar estos créditos sería preciso contar con un plan de actuación en las dársenas que aún no ha sido elaborado.

Nada para flora y fauna

El montante de ayudas comunitarias y del Gobierno central reservaba un apartado para la conservación de flora y fauna acuática que contaba con 542.163,95 euros. Según consta en el expediente de la Consellería, Mar renuncia a hacer uso de ellos sin aportar demasiados detalles. Simplemente alega que "los remanentes de crédito no se prevén ejecutar, por lo que se solicita su baja".

Lo mismo sucede con otra partida, la de transformación de buques, dotada con 325.130 euros. El departamento que dirige Rosa Quintana propone que "se den de baja remanentes incorporados de años anteriores que se tiene previsto no ejecutar". El capítulo de asistencia técnica, con 426.058,61 euros, también esperará a tiempos mejores.

El Gobierno gallego asegura que estará en condiciones de ejecutar estos fondos en el período comprendido entre 2011 y 2013 y explica en el expediente, avalado por la Consellería de Facenda, que "teniendo en cuenta los remanentes de crédito que figuran en el Presupuesto sin que puedan utilizarse para otra finalidad, se pretende llevar a cabo una reprogramación de los fondos destinándolos a otras medidas, por lo que se solicita su baja en el Presupuesto".

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