Los aplazamientos a las empresas suman 8.000 millones

A finales de 2008 y comienzos de 2009 el mercado laboral español se hundía. En seis meses se destruyeron en torno a un millón de empleos. Para evitar que las empresas viables, con problemas de tesorería, tuvieran que despedir a más empleados o directamente cerrar, el Gobierno, con el respaldo de los agentes sociales, decidió recurrir al excedente del sistema de pensiones de 2008. No hizo la pertinente aportación al Fondo de Reserva de la Seguridad Social, y para ello también contó con aval del Parlamento.

Gracias a esta decisión, la Seguridad Social ha podido conceder más aplazamientos en el pago de cotizaciones de lo que lo hacía normalmente sin tener problemas de liquidez. Según el secretario de Estado de la Seguridad Social, Octavio Granado, en este momento el organismo que dirige ha concedido prórrogas en los pagos por valor de unos 8.000 millones de euros. Pero en el primer trimestre de 2010 la situación fue bastante peor: la cuenta pendiente ascendía a 9.500 millones.

"Mientras dure la situación de crisis, la Seguridad Social va a intentar que ninguna empresa que sea viable tenga que interrumpir sus actividades", defendió Granado para argumentar que todavía no ha llegado el momento de intentar ingresar en el Fondo de Reserva los excedentes que el sistema tuvo hace dos años.

No obstante, Granado recordó que el año pasado el Gobierno realizó una aportación de 1.750 millones y que, en conjunto, el incremento anual de los recursos que tiene la hucha de las pensiones fue de 4.300 millones. En este punto, sumaba los intereses que han generado los 60.000 millones que hay invertidos en deuda pública de España (88%), Holanda y Alemania.