Camps abre la puerta al diálogo con Alarte al final de la legislatura

El presidente valenciano, Francisco Camps, abrió ayer la puerta al diálogo con los socialistas para acordar medidas contra la crisis y la reforma del Estatuto de Autonomía. A menos de cinco meses de las elecciones autonómicas, Camps aceptó la propuesta del secretario general de los socialistas valencianos, Jorge Alarte, de buscar un pacto en esos dos grandes temas.

La iniciativa partió del líder socialista, quien llamó a primera hora de la mañana al jefe del Gobierno valenciano para reiterar su predisposición a "arrimar el hombro" ante la crisis. Alarte daba respuesta así al llamamiento a alcanzar pactos "esenciales" que mencionó el jefe del Consell en su discurso de fin de año. "Los valencianos necesitan ya respuestas y medidas económicas concretas", enfatizó Alarte al anunciar el resultado de una conversación en la que ambos dirigentes políticos acordaron, como paso previo a una reunión, que sus equipos trabajen en los próximos días en un documento de consenso.

El socialista llamó ayer al presidente, que ha rechazado 11 ofertas de pactos

El secretario general del PSPV-PSOE destacó que ha expuesto infructuosamente su oferta de diálogo "en 11 ocasiones en dos años", pero al mismo tiempo insistió en valorar el "cambio de actitud" de Camps. La posibilidad de un pacto entre los dos grandes partidos llega en el tramo final de una legislatura marcada por el deterioro de la economía y por un duro enfrentamiento en las Cortes valencianas y en los tribunales entre la oposición y un PP acosado por los escándalos de corrupción.

Con un Gobierno sumido en la parálisis por las implicaciones del caso Gürtel, en el que está imputado el propio presidente del Consell, Camps ha optado ahora por admitir que PP y PSPV "comiencen a trabajar un documento de acuerdo" sobre los puntos propuestos por Alarte. Presidencia de la Generalitat dio cuenta de este paso en un breve comunicado en el que se limitó a señalar que los dos partidos abordarán "las medidas económicas necesarias a adoptar para superar la actual situación económica que atraviesan la Comunidad Valenciana y España". También tratarán la reforma del Estatuto de Autonomía que el PP propuso a final del año pasado en las Cortes valencianas para mejorar la financiación autonómica.

Alarte, que compareció ante los medios de comunicación, fue mucho más concreto en sus objetivos de cara a la negociación con los populares, que en su opinión llega "demasiado tarde" pero "merece la pena" si acaba en acuerdo.

El secretario general del PSPV-PSOE destacó la abultada deuda de la Generalitat y el paro por encima de la media nacional, entre otros graves problemas, para reiterar, en esencia, las propuestas del programa económico que presentó en mayo del año pasado. Los socialistas pretenden "una amplia acción de saneamiento de las cuentas de la Generalitat" que implicaría la reducción del gasto corriente en un 15%, excepto en materia social, sanidad, educación y economía productiva; una reestructuración "a fondo" del sector empresarial público, con la reducción de los 130 organismos y fundaciones existentes a menos de 30 y una disminución a la mitad de los cargos de designación directa, así como la eliminación de varias consejerías y vicepresidencias del Consell. Alarte pidió, además, reformas en las políticas de empleo y una auditoría y saneamiento de la sociedad de grandes proyectos temáticos, de Ràdio Televisió Valenciana y de Ciegsa, encargada de la construcción de colegios.

Presidencia no avanzó sus propuestas. Camps, sin agenda pública ayer, reivindicó en su discurso de fin de año la "austeridad" de su Gobierno y la "eficiencia en el uso de sus recursos económicos", y situó la creación de empleo, la ayuda a municipios y pequeñas empresas como objetivos principales para 2011.