La oposición ve inconcreto el discurso de fin de año de Mas

El Partit dels Socialistes lo vio "contradictorio" y falto de concreción. El Partido Popular lo consideró "poco realista" y "cargado de tópicos", mientras que Iniciativa per Catalunya lo calificó también de "contradictorio" y Esquerra Republicana de "retórico" y "poco concreto". La oposición en pleno criticó el primer mensaje que el presidente de la Generalitat, Artur Mas, dirige a los catalanes. Cada uno desde su óptica política, pero con un común denominador: el reproche de falta de concreción.

El discurso de Mas, grabado en el Palau de la Generalitat, estuvo marcado por dos grandes cuestiones: tuvo un marcado carácter nacionalista -el president instó a "reaccionar" y combatir la "hostilidad" hacia Cataluña- y, por otra parte, se centró en la necesidad de capear el temporal de la crisis económica. En este sentido, Mas llamó a la ciudadanía a "sacrificarse" para que Cataluña pueda "levantar el vuelo".

El PP exige "menos retórica nacional y más soluciones para la crisis"

ERC pregunta a Mas cómo afrontará las sentencias sobre el catalán en la escuela

Desde el PSC, el presidente de su grupo parlamentario, Joaquim Nadal, indicó que los socialistas detectan "elementos de preocupación e inquietud". Como ejemplos, argumentó que la apelación de Mas a profundizar en el autogobierno "tiene poco que ver con la afirmación de la nueva consejera de Justicia [Pilar Fernández Bozal] de que no piensa dar prioridad en la recuperación de competencias en materia judicial". En el capítulo económico, Nadal reprochó a Mas y a su consejero de Empresa y Ocupación, Francesc Xavier Mena, su "falta de propuestas concretas". El PSC también cargó contra el nuevo presidente de la Generalitat porque considera que se ha reservado una "concentración de poder" sin precedentes en el Gobierno catalán.

Por parte del Partido Popular fue su portavoz parlamentario, Enric Millo, quien echó en falta en el discurso de Mas "menos retórica nacional y más concreción en soluciones para salir de la crisis". Millo vio el mensaje de fin de año "excesivamente cargado de tópicos y falto de realismo". Los populares sostienen que la crisis debería ser la primera prioridad y que "no es momento de encender llamas patrióticas y hacer llamados a la construcción nacional". En vez de hablar de "levantar el vuelo", Mas debería "tener los pies en el suelo", apostilló Millo.

Desde las filas de ICV, la portavoz parlamentaria, Dolors Camats calificó de "contradictorias" las palabras de Mas y criticó medidas concretas como la supresión del impuesto de sucesiones. "Es contradictorio su discurso con las primeras medidas que ha anunciado [su gobierno] y creemos que estos esfuerzos acabarán recayendo en los de siempre, aquellos que ven que los salarios se congelan, que la luz sube y cómo el desempleo no para de subir", puntualizó Camats. La portavoz de los ecosocialistas también acusó a Mas de recaer en la "retórica de país y de bandera" de los últimos Gobiernos de Jordi Pujol, por las referencias nacionalistas de su discurso.

También desde Esquerra Republicana su portavoz, Ignasi Llorente, cuestionó lo que la formación ve como "inconcreción" en cuestiones como de qué manera afrontará el nuevo Ejecutivo la sentencia del Tribunal Supremo sobre el uso del catalán y el castellano en las escuelas. "Es un discurso lleno de muchas palabras pero de pocos hechos", dijo Llorente.

El consejero de Interior, Felip Puig, respondió ayer a las críticas de la oposición al discurso de Mas asegurando que sus dirigentes "no han entendido lo que reclama la sociedad catalana" y no han "pasado página al debate partidista". "Están obcecados en la política del siglo XX cuando Cataluña necesita políticas del siglo XXI" y "compromiso y generosidad" como ofreció, dijo, Mas.