Votar con sentido

¿Por qué los Gobiernos autónomos en España han sido desde el restablecimiento de la democracia, con carácter general, mucho más estables y longevos que los estatales? Entre otros factores, porque los ciudadanos no saben de qué se ocupan exactamente y no les exigen responsabilidades por sus actuaciones cuando van a votar.

Esa es una de las conclusiones que se extraen del trabajo Descentralización y control de Gobiernos de los profesores gallegos Santiago e Ignacio Lago Peñas, que ha ganado este año el premio Josep Maria Vilaseca i Marcet del Institut d'Estudis Autonòmics catalán. "El peso del trabajo lo llevó Ignacio", reconoce Santiago, profesor de Economía de la Universidade de Vigo y columnista de EL PAÍS. Junto a su hermano, doctor en Ciencias Políticas y docente en la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona, elaboraron el estudio, que parte de los datos históricos del Centro de Investigaciones Sociológicas y del Instituto de Estudios Fiscales del Ministerio de Economía.

"Los ciudadanos no siempre saben qué Administración toma una decisión"

"Las alternancias en los Gobiernos serán cada vez más rápidas"

"La descentralización plantea problemas de control político, porque los ciudadanos tienen mucho más complicado castigar a los malos gobiernos y recompensar a los buenos", explica Ignacio. "Primero porque no siempre son conscientes de quienes son responsables de las decisiones [...] Y luego hay procesos de contaminación: la gente vota en función de parámetros que no tienen que ver con la elección que está sobre la mesa", añade. "Más de la mitad de la ciudadanía no tiene claro quién es responsable en materia de Sanidad, y ya si hablamos de impuestos, el 80% de la población no entiende el sistema", comenta Santiago a modo de ejemplo.

Las dificultades de los votantes a la hora de hacer pagar a cada uno por lo que le corresponde se derivan en buena medida de la relativa juventud del proceso de descentralización. Esa es la razón, también, de que se vayan reduciendo paulatinamente. "Nuestas conclusiones invitan a un cierto optimismo; la gente aprende", indica Ignacio. Y el aprendizaje es más rápido en las comunidades históricas como Cataluña o Galicia. "Son electores más maduros porque allí la descentralización avanza antes. El despiste medio es unos 15 puntos inferior al de la media de España", detalla Santiago.

"Nuestra predicción sobre el futuro es clara: en el nivel autonomico habrá cada vez alternancias más rápidas y más seguidas. Los 16 años de Gobierno del PSOE en Andalucía no van a volver a repetirse. La alternancia es la esencia, y es mucho más anómalo tener un mismo Gobierno durante 30 años que uno que cambie cada cuatro", aventura Ignacio.