El 'show' fundido a negro de Butaca Latina
Butaca Latina no paga a sus empleados desde octubre y afronta una demanda
Ruth Soto, Miss Costa Oriental de Venezuela hace unos años, aparecía en pantalla mostrando los decorados. "Aquí están las bailarinas, guapísimas ellas", decía, cuando se cruzaba con un grupo de chicas que ensayaba en lo alto de un escenario. La modelo iba presentando a todos los guionistas, presentadores y productores que iba encontrando durante su paseo por los estudios. Le acompañaba un cámara que atendía a sus indicaciones. "Ven, sígueme", ordenaba. La imagen de Ruth Soto haciendo de maestra de ceremonias estuvo repitiéndose una y otra vez durante mes y medio, como si ella en realidad estuviese atrapada en un laberinto del que no pudiese salir. Hasta que un buen día la señal se cortó. Butaca Latina, de repente, se fundió a negro.
El cese de la señal del primer canal de TDT local para la comunidad latina se debió a la falta de pago. A partir de ahí se ha desvelado que la cadena adeuda a la totalidad de sus proveedores, lleva dos meses sin pagar a sus empleados y el principal socio inversor, un productor venezolano, ha presentado una demanda por estafa. La inspección de Trabajo está recabando información para llevar el caso a la fiscalía.
Butaca Latina Film SL, fue constituida con un capital inicial de 3.010,00 euros. Sus principales administradores son Joahn Antonio Mujica Velasquez, un empresario venezolano, y su mujer, Rusthmely Dayana Soto, nombre completo de la que fue Miss Costa Oriental. El matrimonio que forman ambos crearon la sociedad para la prestación de servicios de contratación para artistas, deportistas o actores. La idea inicial derivó en crear el primer canal de televisión para latinoamericanos, un formato que ha tenido éxito en radio y prensa. ¿Por qué no en la pequeña pantalla?
"Ahí fue cuando contactaron conmigo, allá por el mes de mayo", cuenta el productor que ha presentado la denuncia por estafa en el Juzgado de Instrucción número 46 de Madrid. La novia del productor y Ruth Soto se conocían de la época en la que las dos optaron a miss Venezuela. Pusieron en contacto a sus parejas. "A mí la idea de venir a España me motivaba mucho, era un salto profesional importante y más en un proyecto que tenía muy buena pinta", continúa el afectado. En esa época producía en su país un programa de espectáculos que se emitía los sábados. El productor vendió parte de su patrimonio para embarcarse en el proyecto. Creó el nombre del canal, el logo, puso música a los anuncios de promoción y según la documentación que aporta en la denuncia comenzó a mandar las primeras cantidades de dinero.
En Madrid, mientras, Joahn Mujica y Ruth Soto, que habían nombrado como apoderada a una compatriota, llegaron a un acuerdo con una productora para que les cediesen las instalaciones para grabar los primeros programas. Acordaron también alquilar la señal para emitir en TDT. Butaca Latina estaba en marcha. Mujica, por entonces, como relatan los empleados, se empeñó en que tenía que tener un buen coche para las reuniones con posibles inversores. Le pidió a la que era su apoderada que le alquilase un coche de alta gama. "Lo hice a mi nombre porque Joahn me dijo que no le aceptaban su tarjeta. Estuvo tres meses con el coche, a mí me cargaron las facturas del alquiler, las guardo. La casa de coches llegó a amenazarme con llamar a la policía si no lo devolvía", explica la que fue su apoderada. "Después de un tiempo vi que todo iba mal. No se pagaba a nadie, todo era un caos. Me fui antes de que todo se desmoronase", añade.
La productora que alquiló sus instalaciones al canal no ha cobrado. Decidió no dejar entrar más a los responsables de Butaca Latina en el estudio. Los proveedores de todo tipo acumulan las facturas. Los pagos se estipularon a 60 y 90 días. Pasado ese tiempo, nadie ha visto ni rastro del dinero. "He sido engañado", prosigue el productor venezolano, que aportó unos 600.000 euros de inversión. "Salimos al aire en pruebas pero no teníamos material suficiente para llenar las horas de emisión. De la noche a la mañana nos cortan por falta de pago. Llamé a Joahn y le pregunté qué había pasado. Me dijo que tenía que poner otros 175.000 euros por un pago especial que había que hacer. Ahí me di cuenta que esto era una estafa".
La carta de Pablo Zavatti, apoderado legal de Butaca Latina, es la única versión que existe por parte de la empresa. Este periódico ha intentado ponerse en contacto con el matrimonio Mujica Soto pero no lo ha conseguido. Zavatti explica que desde el 15 de noviembre Butaca Latina arrastra problemas económicos. "Los presupuestos que se estimaron se sobredimensionaron ya que existió un gran incremento de personal de trabajo". "De igual manera los gastos de producción (...) cambiaron repentinamente ya que los distintos proveedores vieron un crecimiento y una gran posibilidad de ganancia realizando cambios de precios", se lee en la misiva. La empresa ha considerado la suspensión de actividades laborales a partir del 23 de diciembre y asegura que está trabajando para llevar a cabo un Expediente de Regulación de Empleo (ERE).
Los empleados del canal, sin cobrar desde hace dos meses y medio, han denunciado el caso a la Inspección de Trabajo. Se presentaban en la productora y no les dejaban entrar. Las oficinas que tenía Butaca Latina en la calle Santísima Trinidad van a ser desalojadas por impago. El inspector ha remitido una carta a Joahn Mujica en la que le informa de que su actitud podría suponer "la comisión de graves infracciones en materia laboral". El show de Butaca Latina ha acabado.
Una cronología
- Butaca Latina comenzó a emitir en pruebas el 1 de octubre a las 18:00 en el TDT local de la Comunidad de Madrid. La idea era que las pruebas acabasen a final de octubre pero se fue retrasando.
- Finalmente se fundió a negro el 29 de noviembre por falta de pago.
- La parrilla, que planeaba una programación completa de 24 horas, estaba compuesta por progamas como En América es de día, un magazine nocturno: Latinos por Europa; Entre bate y balón, de actualidad deportiva; Carolina y dos puntos, un programa del corazón presentado por otra miss.
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