Sol y playa a las puertas de la Navidad

Las playas de Benidorm y Alicante, en particular, y las de todo el litoral valenciano en general, presentaban ayer un trasiego más propio de la primavera que de estas fechas previas a la Navidad. Centenares de personas aprovecharon el repentino subidón de las temperaturas para echarse a la playa, la mayoría para relajantes paseos, aunque hubo valientes que no dudaron en darse un chapuzón. El mercurio superó ampliamente los 20 grados centígrados en toda la costa, con Oliva a la cabeza con una máxima de 26.

El agradable tiempo en los tres días de puente festivo ha llevado a Benidorm a rozar una ocupación en torno al 90% de su planta hotelera, según la patronal Hosbec. Mientras casi toda la Península era azotada por temporales de viento y lluvia o padecía inundaciones, la capital turística valenciana ha visto tomadas sus playas en pleno diciembre.

La Costa Blanca, y sobre todo Benidorm, han vivido ajenos al mal tiempo que ha dominado en España a lo largo del puente festivo y han superado sin apenas impacto la huelga salvaje de los controladores aéreos. La patronal Hosbec cifró el importe de las cancelaciones de reservas en 10.000 euros, cifra que habrá sido compensada con las de última hora de turistas que no han viajado en avión. Más de la mitad de los visitantes son extranjeros con reservas superiores a una semana y la mayoría de los españoles llegan por carretera.