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BBK plantea un ahorro en Cajasur similar al que formuló Unicaja

La caja vasca avanza que recortará entre 40 y 45 millones en salarios

Los sindicatos de Cajasur se reunieron ayer con los ejecutivos enviados por los nuevos dueños de la entidad cordobesa, la vasca BBK. No se trataba de la mesa laboral que cerrará el recorte final en la plantilla de Cajasur, pero sí se quiso poner las cartas sobre la mesa y empezar a negociar. BBK rompió la baraja planteando un ajuste económico para Cajasur de entre 40 y 45 millones en gastos de personal, indican fuentes de CC OO. Una cifra parecida a los 43,3 millones que calculaba Unicaja en la fase final de su frustrado intento de fusión con Cajasur, en mayo. Esa cantidad suponía según Unicaja, un ajuste total de 564 empleados de Cajasur en tres años (424 serían con prejubilaciones pactadas en una primera fase y, después, 140 bajas con medidas de carácter voluntario).

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Pero aquello ya es historia. Y ayer, BBK no quiso hablar cuántos empleados podrían abandonar la caja. Aunque en la mente de los trabajadores ya se hacen cálculos. CC OO tiene material con el que trabajar. Un dirigente del sindicato señala que, el 4 de noviembre, en una reunión bilateral entre BBK y representantes de Comisiones Obreras a nivel estatal, andaluz y de Cajasur, se planteó un recorte de 700 empleados de la caja. 500 de ellos pertenecerían a la red de oficinas (107 de Córdoba y provincia), mientras que 200 serían de los servicios centrales. A ellos habría que sumar otros 200 trabajadores de la red de empresas participadas del grupo Cajasur y de la Obra Social.

Por su parte, el sindicato Aspromonte -mayoritario en Cajasur y tradicionalmente afín al Cabildo de Córdoba, antiguo patrono de la caja- estima bastante menos recorte. Aspromonte, que se opuso de lleno a la unión con Unicaja, afirma que "fuentes financieras" le han avanzado que la cifra de 480 bajas es más razonable.

La traducción final en el empleo del ahorro que busca BBK, dependerá de cómo se aplique ese ajuste. Por ejemplo, CC OO recuerda que Unicaja iba a aplicar un ajuste salarial para evitar un mayor número de bajas. Así que, ahora mismo, todo es posible. Los sindicatos señalan que la entidad vasca pidió ayer la implicación y la colaboración de los representantes de los trabajadores "para lograr entre todos los objetivos sin medidas traumáticas", dijeron en Aspromonte en referencia a un sistema de prejubilaciones o bajas incentivadas. "Nosotros vamos a recoger el guante y a aportar soluciones", prosiguieron. Algo menos optimistas eran en CC OO: "El ahorro económico es el que es. Y nos han dicho que tendremos que aceptarlo", señalan. "Las medidas no traumáticas dicen que se harán 'en la medida de lo posible'. Por ejemplo, sobre las prejubilaciones nos han dicho que para los sindicatos puede ser la mejor solución pero que para ellos es la más cara", prosiguen fuentes de CC OO. En BBK, por su parte, no se quiso valorar el resultado de una reunión que consideraron privada.

La próxima cita se ha fijado para el 16 de diciembre. Los sindicatos han pedido más información. En concreto, esperan contar con la estructura retributiva por categorías laborales de la empresa.

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