"Hemos hecho el partido imaginado"

Parecía, escuchando a Quique Flores en la sala de prensa del estadio Bernabéu, que el objetivo del Atlético, anoche, era no salir vapuleado. El técnico rojiblanco dijo que no vio problemas, que no tenía nada que reprochar a sus jugadores, que su equipo en ningún momento renunció a la pelota, que siempre controló el partido y que incluso le gustó la actitud y la entrada en el juego. Lo afirmó ante la mirada atónita de los periodistas. "¿A qué se debe, entonces, la derrota?", le preguntaron. "Hemos hecho un partido muy serio, marcado únicamente por los goles encajados de forma trágica, por detalles puntuales que se escapan de la pizarra", comentó.

En el minuto 20 ya iba perdiendo el Atlético por 2-0. Después del último partido, contra el Almería, Quique había dicho precisamente que lo que más le había gustado era que sus jugadores entraran el campo tan concentrados. "¿Sigue pensando lo mismo?", le insistieron. "Sí. Hemos entrado bien. El resultado no ha hecho justicia a la entrada del equipo en el juego. Las primeras llegadas han sido nuestras [en realidad, el primer tiro a puerta, de Forlán, llegó en el minuto 24; el primero del Madrid, de Pepe, en el 3] y no tengo nada que reprochar a los jugadores", analizó. "Hemos tenido intensidad y orden. Hemos hecho el partido imaginado. Solo nos ha faltado el gol", prosiguió.

"Estuvimos muy serios, pero encajamos dos tantos de forma trágica"

"Solo me quejo de la falta de contundencia en el despeje", reconoce el técnico

"Han ganado por errores nuestros, no por virtudes suyas", coincide Forlán

"¿No vio ningún problema en su equipo?". "¿Por qué jugó sin intensidad?". "No he visto problemas. Tampoco falta de intensidad. Hemos disputado la pelota al Madrid. Si de algo me quejo es de que ha faltado algo de contundencia en el despeje. Pero en ningún caso hemos renunciado a la pelota. Hemos intentado finalizar, no nos han hecho ocasiones y hemos controlado el partido", sostuvo, como si la posesión por sí sola garantizara goles y victorias. "La gran duda era si el equipo iba a estar hoy a la altura. También de si íbamos a salir vapuleados de aquí. Yo he visto un equipo fuerte, entero, sólido mentalmente. Las sensaciones con las que me marcho son absolutamente buenas. Hemos parado a jugadores importantísimos: no he visto el partido de Özil, ni el de Cristiano, ni el de Di María ni tampoco el de Higuaín", continuó Quique; "la única diferencia la ha marcado la puntualidad con el gol".

José Mourinho debió de dejarse contagiar por la forma de ver el fútbol de su compañero de profesión al reconocer que el Atlético fue, hasta ahora, el rival que más problemas creó al Madrid porque, según explicó, está bien entrenado. En cualquier caso, él se marchó a casa con tres puntos. Quique, en cambio, con una derrota, pero orgulloso de sus jugadores. "Tengo la sensación de que nos vamos habiendo controlado el partido", insistió.

Dice Quique que no le gusta ser derrotado, pero que las derrotas no le hacen perder la perspectiva. "No la pierdo, no; mañana, a mis jugadores les contaré el partido que hemos jugado no en función de mi estado de ánimo ni del resultado, sino en función de las sensaciones y todas son buenas porque hay equipo", comentó.

Forlán y Mario Suarez se sumaron al discurso del técnico. "Hemos plantado cara al Madrid, hemos estado bien, hemos tenido nuestras oportunidades... No nos han vapuleado ni han sido superiores. Simplemente, han metido dos goles rápidos que les han hecho el partido más fácil", comentó el medio. "Los errores son claves en partidos como este. Y hemos cometido dos. Han ganado por errores nuestros, no por virtudes de ellos", le hizo eco el delantero uruguayo, al que Quique dijo haber visto con "más chispa".

Solo Reyes se salió del guión. El extremo sí pareció haber visto el mismo partido que el público: "Dos goles tan pronto te dejan sin capacidad de reacción".