Costa rechaza pactar las cuentas porque el presidente optó por el PNV
La oferta para pactar las cuentas autonómicas es "sincera" y los socialistas apurarán hasta el último momento antes de presentar una enmienda a la totalidad. La diputada del PSPV-PSOE Cristina Moreno reiteró ayer la postura expresada por el secretario general de su partido, Jorge Alarte, de buscar "un compromiso claro para reducir el gasto corriente", evitar la venta de patrimonio y dibujar un escenario de "equilibrio financiero a 10 años".
La respuesta de los populares vino enseguida. El diputado Ricardo Costa calificó de "pura hipocresía y una tomadura de pelo" la propuesta de los socialistas y se refirió al pacto del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, con el PNV y Coalición Canaria para sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado. Costa, cuyo partido apostó por que el presidente del Gobierno no pudiera aprobar las cuentas y tuviera que adelantar las elecciones, no tuvo reparos en asegurar que los socialistas "han dado la espalda al resto de grupos" para "alargar la agonía de Zapatero en la Moncloa". Y dejó claro que lo único que está dispuesto a negociar su grupo son "todas aquellas enmiendas parciales que presenten no sólo los socialistas sino todos los grupos de la Cámara y que vayan dirigidas a mejorar los presupuestos".
Cristina Moreno, además, de reiterar la oferta de pacto, comentó que los presupuestos no son "austeros", sino que son "pobres", ya que no revisan los objetivos ni recortan lo superfluo. En opinión de la diputada socialista, las cuentas que el Consell de Francisco Camps presenta para el año que viene se han cuadrado "a martillazos".
Impuestos con trampa
Como ejemplo de la falta de reorientación, Moreno citó el hecho de que la empresa pública Sociedad de Proyectos Temáticos de la Comunidad Valenciana todavía mantiene como objetivos la Esfera Armilar, el Museo de la FIFA o la denominada Ciudad de las Lenguas. Tampoco hay un recorte sustancial del sector público empresarial ya que, señaló Moreno, la llamada "reorganización del sector público" se ha limitado a la supresión de tres empresas cuyo presupuesto total sumaba 8 millones de euros.
Finalmente, la parlamentaria socialista se refirió a las quejas contra el sistema de financiación autonómica y las proclamas del PP en el sentido de que su política se basa en la congelación o la rebaja de impuestos, incluso durante la crisis. Moreno explicó que gracias al nuevo sistema, la Generalitat incrementa los ingresos procedentes del IRPF y el IVA. Por eso acusó a los populares de "hacer trampa" al hablar de impuestos.
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