Exquisito Tenerife
70 playas para bañarse en invierno. Un parque con orcas y papagayos. Y la arquitectura de Herzog & De Meuron. Planes apetecibles en la isla del Teide
Es la mayor de cuantas integran las Canarias; la isla más alta y picuda gracias a los 3.718 metros de altitud del Teide; pródiga en endemismos: reúne hasta 2.000 especies diferentes. Es Afortunada tanto por conjugar nieve y mar como por su variedad microclimática. Arquetipo canario de norte humidificado por los alisios y sur árido y mayormente playero. Desde arquitectura de vanguardia a 20 complejos hoteleros de cinco estrellas, todo cabe en Tenerife. Pasado mañana estrena temporada alta, y a ella se encamina una hégira de bañistas abducidos por su nómina apabullante de recursos turísticos. Con una hora menos, siempre da tiempo para todo.
01 El faro julioverniano
La sola mención de Anaga, en la punta septentrional de Tenerife, conjura la gran aventura montañera de costa. Hablamos de un faro de primer orden, monitorizado, solo alcanzable por veredas o por mar desde un puerto mínimo, útil para darse un chapuzón. Situado a 247 metros de altitud, es el tercer faro que raya a más altura en España.
En la ruta de San Andrés a Chamorga (Santa Cruz de Tenerife), tras 25 kilómetros de curvas, se marea hasta el más curtido de los navegantes. Es el peaje que hay que pagar por el disfrute del confín isleño. El caserío de Chamorga, repleto de castañas por estas fechas, marca la frontera del monteverde.
En media hora se sube a pie hasta Tafada, ruina que se bordea dejándola a la derecha. Luego, en 10 minutos, escoltados por bejeques y siemprevivas, bajamos al mirador de la Asomada, de una calidad estupefaciente frente a los roques de Fuera y Dentro. También se ve un drago plantado hace 25 años. El sendero serpenteante y en acusada pendiente nos conduce, después de 45 minutos, al faro de Anaga. Pocas veces se tiene la oportunidad de fotografiar una linterna histórica (data de 1864) de 16 montantes y cabezas de león en los canalones. Sobre el cupulino, la veleta fundida por los rayos.
Media hora se invierte en bajar al caserío semiabandonado de Roque Bermejo. La abundancia de exvotos en la ermita contrasta con la soledad que absorbe todo cuanto se divisa. Al atardecer hay que negociar los 470 metros de desnivel hasta Chamorga sabiendo que nos espera una cerveza Dorada en Casa Álvaro.
Para la excursión conviene llevar agua, sombrero, botas, chubasquero y bocadillos.
02 Catálogo playero otoño-invierno
En los 400 kilómetros de costa tinerfeña hay 70 playas por las que dejarse abducir. En Anaga ejerce un particular embrujo paisajístico la enlutada playa de Benijo, que, por su peligrosidad, solo permite mojarse los pies. Si Benijo reina en barlovento, la domesticada playa de las Teresitas lo hace a sotavento tapizada con cuatro millones de sacos de arena traída del Sáhara.
La playa del Socorro (Los Realejos) recibe sin trabas el golpeo del mar del Norte, lo que la convirtió en cuna del surf isleño. Muchos parapentistas la usan como pista de aterrizaje.
Muy acogedora, de aguas limpias y profundas, la urbanizada playa de la Arena (Santiago del Teide) es una de las pocas que garantizan aportes de arena por estas fechas. A muchos nórdicos les prescriben estas arenas de negro semblante cual medicamento contra el reúma y la artrosis.
El desarrollo hotelero del sur ha respetado islas de naturaleza. Así ocurre con la playa de Diego Hernández (Adeje), de arena blanca desprendida de la piedra tosca. Aquí manda el naturismo con gotas de hippismo. Acceso a pie (15 minutos) desde La Caleta.
Al buscar la costa oriental topamos con el paraíso de windsurfistas y kitesurfistas de El Médano (Granadilla de Abona). Pero los bañistas prefieren el socaire de la montaña Roja, en la Tejita.
03 Jugar con el Atlántico
El género de los charcos intermareales es uno de los de mayor arraigo en las islas occidentales de Canarias. Lo que constituiría una imprudencia -dejarse golpear por el fiero oleaje- se convierte en invulnerable y jocoso chapuzón merced a las piscinas que acolchan la caída justo donde rompe la ola durante la pleamar o a media marea si el Atlántico se enrabieta. Los vasos se llenan al ritmo de las mareas dos veces al día, y las barandillas actúan como un antídoto contra la resaca. Todo crea la ficción de estar bañándonos en medio del océano.
El ingeniero Joaquín Soriano fue responsable de la remodelación de las piscinas de Bajamar (La Laguna) utilizando pavimento de piedra volcánica sobre el que se levantan pérgolas y bancos orientados a distintos ángulos. A cuatro kilómetros, en Punta del Hidalgo (La Laguna), las piscinas han sido totalmente rehabilitadas. Retomando el concepto intermareal, el artista lanzaroteño César Manrique alumbró en el Puerto de la Cruz el complejo Costa Martiánez, valiéndose de seis piscinas de agua salada, cuatro para adultos (una climatizada) y dos infantiles, en un marco subyugante por su vegetación y placidez. En el centro del lago se eleva el surtidor que lo llena, con restaurante y casino subterráneo.
04 Loros y toboganes
Loro Parque (Puerto de la Cruz, al norte) y Siam Park (Costa Adeje, al sur) son fruto del afán de la familia Kiessling por reproducir Tailandia en el litoral tinerfeño. A modo de jardín zoológico y botánico, el Loro Parque atesora la mayor reserva mundial de papagayos. Nadie que asista al show de las orcas dejará de sorprenderse con el descomunal chapoteo, cuando no por la inaudita vocalización de los cetáceos. La explosión de vida no da respiro: al igual que la cría de orca nacida el pasado día 12 de octubre, pueden verse los retoños de jaguares, perezosos mellizos y monos titís. Con nitidez de anuncio de limpiacristales se revela desde la cinta transportadora la colonia de pingüinos rey mientras se escucha música atmosférica. Un pingüinario de ensueño.
El Siam Park es un parque acuático ambientado en el reino de Siam que se ve recorrido por agua recién desalada a 24 grados. Respecto a la adrenalina que se descarga hay gradaciones: los pusilánimes se dejan llevar sobre donuts flotantes por el río de 1,2 kilómetros, con algunos rápidos y el túnel que atraviesa el tanque de los tiburones.
Impone el tobogán de 28 metros por el que uno se desliza cruzando los brazos al modo egipcio; bien mirado, la dosis de emoción la produce la altura, antes que el impacto con el agua. El rey de los toboganes entubados, The Dragon, escupe el flotador de tres plazas en un gigantesco embudo al aire libre que al final deglute a los navegantes. Todo el que puede repite. Súmese a lo dicho una playa artificial de 9.000 metros cuadrados de arena blanca del Algarve.
05 Rutilante arquitectura
Tenerife Espacio de las Artes (TEA) es la postal de la Santa Cruz de Tenerife contemporánea. Este contenedor amoldado por los arquitectos suizos Herzog & De Meuron, y que acoge los múltiples espacios de un centro cultural inaugurado en octubre de 2008, nos reclama desde la distancia. Jacques Herzog, todo hay que decirlo, dispone de casa en Arico y es un devoto de la isla y de quienes la habitan: "Adoro a los tinerfeños. Tienen una cultura mucho más cerca del corazón que la que tenemos los suizos".
Es cierto que el TEA hay que desentrañarlo; crece a medida que entras en él; los espacios se fracturan y separan. Y no faltan vecinos que lo cruzan por su plaza triangular. La biblioteca exige, con mayor magnetismo aún que las salas museísticas, la decisión de mirar, de contemplar muros que reproducen el pixelado del mar y que iluminan gotas-lámpara como de ámbar. Hasta el 6 de enero abre la exposición El silencio de los objetos, aporte al género de la naturaleza muerta con fondos de la Colección Ordóñez Falcón de Fotografía (COFF). El 31 de enero se clausurará la muestra Si quebró el cántaro, enfocado al abuso y maltrato en la infancia, con firmas que van de Francisco de Goya a Alexander Rodchenko.
06 Tiempo de guachinches
Hay pocos elementos canarios tan profusos, confusos y difusos como los guachinches. Originalmente eran tenderetes colocados por los viticultores el día de San Andrés (30 de noviembre) para dar salida a su producción principalmente a los ingleses y, con el correr de los años, al vecindario. Dichas bodegas familiares trascienden con mucho el alcance de un bar por cuanto nos traslada al Tenerife que no figura en los folletos. Su mayor implantación abarca desde La Matanza hasta Icod de los Vinos.
En el guachinche se bebe vino acompañado de unos pocos platos de la gastronomía local. El Churrasco abre el 2 de diciembre en una calle de La Corujera que suma un desnivel superior al 25% (menuda aventura). Consta de amplia nave con mesas redondas junto a una cocina donde el frigorífico ocupa un puesto preferente junto a las peladoras de papas (patatas). José Eladio maneja la parrilla, sale al exterior y arranca una nota larga y profunda al bucio (caracola) que ya soplaron los guanches.
07 Dos playas: del Bollullo a Los Patos
La última comedia romántico-musical de David Serrano, Una hora más en Canarias (2010), se rodó en el norte tinerfeño. La playa idealizada en el filme no es otra que la del Bollullo (La Orotava). Lo que le falta en seguridad a la hora de nadar lo suple con paisajes volcánicos que se hacen acompañar de una araucaria y un drago. Se puede ir caminando desde el Puerto de la Cruz y acercarse después a la playa de Los Patos, de atmósfera muy agradable aunque peligrosa para el baño.
Para completar la jornada, el puerto de Garachico es una buena elección, tanto su castillo (centro de información patrimonial) como el Roque, el hotel La Quinta Roja y la piscina del hotel San Roque. Del precioso casco histórico hay que anotar en la hoja de ruta el ex convento de San Francisco por la exposición sobre vulcanismo que incluye la erupción de 1706, cuyas coladas se aprecian bajando por la montaña.
08 Locales con gusto
La noche es un abrir y cerrar de ojos en Tenerife. El Faro Chill Art (www.faro.chillart.org), en Adeje, es hegemónico en el sur con su aire tinerfeño-griego-ibicenco. Encandila por los atardeceres desde la terraza exterior con mojitos granizados en mano. Para los sábados se reservan sesiones house, y para el jueves 4 de noviembre, salsa lounge. Las chicas entran gratis el viernes 19, y les esperan strippers masculinos y juguetes eróticos.
En Playa de las Américas cabe mencionar, por su ambientación budista y clientela canaria y residencial, el Bar Unión de Américas. A 500 metros de distancia, en el flamante Omm, se puede desayunar, comer y cenar, y a partir de medianoche, entregarse a sesiones discotequeras. Mañana celebra la Noche de Halloween.
Sin embargo, en programar eventos nadie supera al Blanco Bar Art & Café (www.blancobar.com), del Puerto de la Cruz. Su decoración minimalista sirve de marco los miércoles a monólogos humorísticos: Miguel Miguel (día 3 de noviembre) y Javier Nache (día 10). Consultar la programación de exposiciones y conciertos.
La Noria es la zona trendy de la capital santacrucera. A nadie deja indiferente Mojos y Mojitos (www.mojosymojitos.com): mojos por su comida canaria y japonesa, y mojitos por su bailoteo nocturno.
09 Vino volcánico
El 60% de la viticultura canaria se concentra en Tenerife. Este noviembre, las hojas de las viñas adoptan tonos amarillentos y rojizos. La pasión enoturística nos lleva a El Sauzal, a la hacienda canaria (siglo XVII) que aloja la Casa del Vino La Baranda, donde se muestra el patrimonio vitivinícola insular a través de sus cinco denominaciones de origen. En La Baranda recogemos el tique Vive Monje, que vale por una visita gratuita a Bodegas Monje, situada a dos kilómetros y que brinda una excelente muestra de viñedos de medianía bajo la denominación de origen Tacoronte-Acentejo. Felipe Monje, a quien se le suele ver, ha rodeado la viticultura de un aura artística a la par que gastronómica. La visita pasa por la bodega tradicional y finaliza en la sala de barricas y de exposiciones. El restaurante es digno de mención. El 6 de noviembre se inaugura una exposición de grafiteros, y el día 20 el maestro cortador Fran Alonso intentará, para el Libro Guinness de los récords, la loncha de jamón más grande del mundo. El vino Hollera Monje se presentará el día 27.
En La Guancha, Juan Jesús Méndez, que no es sino una enciclopedia enológica canaria, regenta Bodegas Viñátigo. Mediante un cono volcánico artificial se baja a la gruta de colada basáltica donde se catan los vinos emanados del Teide, singularizados por variedades autóctonas casi extintas, como la gual. Su tinto Tintilla es una de las referencias de la denominación Ycoden-Daute-Isora.
El olvidado sur tiene en Bodega Frontos una interesante visita en las medianías de Granadilla de Abona. Acaba de poner a la venta su baboso negro añada 2009.
Guía
Dormir
» Hotel rural Costa Salada (922 54 60 62; www.costasalada.com). Valle de Guerra. La Laguna. Dormir en un acantilado perdido escuchando el fragor de las olas es patrimonio de esta casa. La doble, con desayuno, 120 euros.
» El Patio de Tita (669 02 86 77; www.fincaelpatio.com). La Zamora Baja. Los Realejos. En el valle de La Orotava, casona tradicional canaria con fachada colonial. Cinco suites-apartamentos. 112 euros (con desayuno).
» Hotel Jardín Tropical (922 74 60 00). Gran Bretaña, s/n. Costa Adeje. El arquitecto de este imponente complejo, Melvin Villarroel, falleció el pasado 4 de octubre. 264 euros, con desayuno.
Comer
» Casa de África (922 59 01 00). Playa Roque de las Bodegas, 3. Taganana (Santa Cruz de Tenerife). Tanto el comedor como la terraza destilan simpatía canaria. Elegir el pescado del expositor. Y de primero, el pulpo frito con pimientos rojos dulces. Unos 15 euros.
» El Burgado (922 12 78 31). Playa de la Arena. Buenavista del Norte. Sirvió de escenario al filme Una hora más en Canarias. Pescado fresco abierto a la espalda con ajo frito. Unos 30 euros.
» Masía del Mar (922 71 08 95). Caleta de Adeje. Pescado fresco en lo que fue un almacén portuario de caña de azúcar (siglo XVI). Unos 35 euros.
Información
» Infoturismo Tenerife (008 00 10 01 01 00; www.webtenerife.com).
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