La Audiencia prorroga la prisión de dos guardias civiles por riesgo de fuga

Los dos guardias civiles imputados por tráfico de drogas, tenencia ilícita de armas, cohecho y revelación de secretos continuarán en la cárcel a pesar de haber cumplido dos años en prisión provisional. Así lo ha decidido el tribunal de la sección segunda de la Audiencia de Valencia. Su principal argumento para prorrogar la suspensión de libertad: el riesgo de fuga.

Carlos Augusto Palomo y Rafael Segura estaban destinados en el cuartel de Tavernes Blanques. Fueron detenidos el 11 de octubre de 2008 por su supuesta implicación en el tráfico de drogas de una red de narcotraficantes que pudo introducir por el puerto de Valencia más de 600 kilos de cocaína.

Fueron detenidas una veintena de personas. El fiscal permitió que todos ellos, excepto los dos guardias civiles, salieran en libertad con fianzas fijadas, como cantidad media, en 10.000 euros, aunque inicialmente para alguno de los imputados se llegó a pedir 300.000 y a pesar de que el juez instructor y la Audiencia optaron por mantenerles, mayoritariamente, en prisión. Están en libertad, incluso, los que fueron detenidos con la droga en su vehículo.

Llevan dos años en prisión provisional por drogas, armas, cohecho y revelación

Sin embargo, los dos guardias civiles, uno de ellos imputado también por un supuesto delito de torturas a un inmigrante cubano sin papeles, no han podido revertir su situación de prisión provisional. Lo intentaron el pasado septiembre cuando se celebró la vista para estudiar si se les dejaba en libertad o se prorrogaba la prisión.

La sala ha optado por mantenerlos en prisión, aunque no podrá hacerlo por un periodo superior al 11 de octubre de 2012, aunque la celebración de juicio está prevista para dentro de unos meses.

Ambos guardias civiles se enfrentan a penas que pueden, como recoge el auto, superar los 20 años de cárcel. La sala ve claro el riesgo de fuga y por ello ha preferido no asumir riesgos.

Detalla el auto que sobre Rafael Segura "hay informes que le atribuyen incrementos patrimoniales ligados a las actividades delictivas que se le atribuyen". Y añade que "no hay constancia de datos acreditativos de vínculos que permitan garantizar que, en caso de quedar en libertad, vaya a permanecer a disposición del tribunal". Más aún, "hay informes que le atribuyen incrementos patrimoniales no justificados". Por ello, "si quedara en libertad resulta presumible que tendría facilidad para la huida" tanto por los contactos como por el dinero acumulado.

Carlos Augusto Palomo recibe un mensaje similar. "Constan informes que le atribuyen incremento patrimonial vinculado a los hechos que se le atribuyen". Eso y su circunstancia personal "permiten efectuar un pronóstico de riesgo de fuga si quedara en libertad".