Consenso para cerrar las disputas

Federico Ghizzoni, de 54 años, es el nuevo consejero delegado de UniCredit. El ejecutivo italiano sustituye a Alessandro Profumo, destituido hace dos semanas por el consejo del banco más internacional de Italia bajo la acusación de haber pactado en secreto la entrada masiva de capital libio.

Ghizzoni era uno de los cuatro viceconsejeros de Profumo desde el pasado agosto, y desde 2007 era responsable del área de negocio en el centro y este de Europa, que todavía hoy aporta un tercio de los beneficios totales del grupo.

Su nombramiento fue decidido el jueves por unanimidad, a propuesta del presidente, Dieter Rampl, durante una reunión celebrada en el Bank Pekao de Varsovia, quizá como símbolo de la especialidad de Ghizzoni, que intentará, dijo, "reforzar el liderazgo de UniCredit en Europa".

El ejecutivo trabaja en banca desde 1980 y cuenta con experiencia exterior

La nota oficial hecha pública por el gigante crediticio italiano, presente en 22 países, señala que la elección de Ghizzoni se debe a "su fuerte liderazgo, su capacidad de hacer equipo, su gran experiencia en la industria de los servicios financieros internacionales y su profundo conocimiento del grupo".

El banco decidió no nombrar de momento un director general, e informó de que todavía no ha diseñado el nuevo modelo de organización de la cúpula del grupo, en el que además de Ghizzoni había hasta ahora tres viceconsejeros: Roberto Nicastro (que sonó con fuerza para suceder a Profumo), Paolo Fiorentino y Sergio Ermotti.

El reto de Ghizzoni será mantener y superar la espectacular gestión de Profumo, que en solo 15 años logró convertir a UniCredit en un coloso financiero con 164.000 empleados. Tras la fusión con el alemán HVB y conquistar el emergente mercado de los países excomunistas, Profumo metió al banco entre los 10 grandes de Europa, para luego unirse a Capitalia (la antigua Banca de Roma que financió a la Democracia Cristiana) y situarlo entre los dos primeros.

Ghizzoni empezó a trabajar en banca en 1980 como jefe de relaciones con los clientes en una sucursal del Credito Italiano en Piacenza, la ciudad donde nació en 1955. Luego desarrolló su rápida carrera en el norte de Italia y en el extranjero. En 1992 se fue a Londres y después a Singapur, Turquía (lo que le valió el apodo de "el turco") y Polonia.

Según han señalado varios analistas, es el candidato de consenso que equilibra en el consejo el peso de los socios alemanes HVB y Allianz; las presiones regionalistas y antilibias de la Liga del Norte (que controla la poderosa caja de Verona), y las ambiciones personales de Silvio Berlusconi y Cesare Geronzi, actual presidente de Generali y ex de Mediobanca. Según La Repubblica, el próximo gran movimiento de UniCredit debería ser su fusión con la aseguradora Generali. Pero el hermético Geronzi lo ha desmentido de plano.