La economía lleva el enfriamiento a la Bolsa

La debilidad de la economía de Estados Unidos y, sobre todo, la posibilidad de que la Reserva Federal esté pensando en nuevas medidas de apoyo, ha caído como un jarro de agua fría sobre los mercados de valores a ambos lados del Atlántico.

Apenas un par de días después de declararse olvidada la recesión y descartarse una doble caída, la Reserva Federal ha sorprendido a los inversores al anunciar que mantendrá bajos los tipos de interés por un tiempo prolongado al haber bajado el ritmo de la ya débil recuperación.

Los mercados de valores europeos abrieron la sesión bajo el impacto de esas declaraciones que, antes o después, tendrán un importante eco en Europa, donde ya se espera que la economía alemana no crezca en la segunda parte del año al mismo ritmo que en la primera. Parece que el mundo actual ha hecho suya aquella vieja idea del crecimiento cero, pero sin buscarlo ni estar preparado para ello.

El Ibex 35 abrió esta última sesión con un discreto avance hasta los 10.805,50 puntos, que era más el eco del cierre equilibrado de la Bolsa de Nueva York la noche anterior, que una posibilidad de funcionamiento a corto plazo. De hecho, en pocos minutos quedó claro el desequilibrio en favor de las posiciones vendedoras y el principal índice de la Bolsa española buscó otra vez la proximidad del nivel de los 10.500 puntos, para terminar cerrando la sesión en 10.555,20 puntos, con una caída del 1,93%.

El sector bancario volvía a capitanear la orientación a la baja, tras anunciar el gigante alemán Deutsche Bank que tendrá pérdidas en el tercer trimestre. Los inversores no esperaron a preguntar si las entidades españolas tendrían los mismos problemas y optaron por deshacer posiciones en un sector que, cada día que pasa, parece más complejo.

Las dudas sobre la evolución de la economía en los próximos meses no afectan solo a los inversores, ya que los consumidores se hacen eco también de la incertidumbre general.

El avance del dato de confianza de los consumidores de la eurozona del mes de septiembre mejoró en dos décimas, pero continúa en terreno negativo, al tiempo que la producción industrial descendió en julio el 2,4%, aunque mostró una mejora del 11,2% respecto del dato del año anterior.