Mourinho se desmarca de Messi

Acabado el partido, los jugadores del Barça se recogieron en el vestuario del Calderón. La cabeza gacha, imposible mirar al marcador, por más victorioso que fuera (1-2) después de un partido exquisito. Todos estaban expectantes con la primera impresión del experto fisioterapeuta Emili Ricart, pendientes del parte médico del infalible doctor Ricard Pruna, preocupados por el llanto desgarrador de Messi, el mejor jugador de fútbol, el peor paciente del mundo. El tobillo de la Pulga se había hinchado tanto que el barcelonismo llegó a temer por una lesión como la de Maradona. Hasta que Ricart levantó la cabeza, Pruna redactó el parte y Guardiola compareció ante la prensa. A falta de la resonancia magnética, no se apreciaba ninguna lesión ósea y se anunciaba un esguince de ligamentos. Messi puso entonces el pie a tierra, abandonó el campo en muletas y nada más llegar a Barajas recuperó una sonrisa que se agrandó ayer cuando, ya sin necesidad de apoyos, se confirmó en la clínica que solo estará de baja los dos próximos partidos, mañana contra el Sporting y el sábado en Bilbao. Un alivio mayúsculo tras un momento de tensión que abona posturas opuestas: no había para tanto o, en cambio, se impone prevenir antes que curar.

Villa: "La entrada fue escalofriante, da repelús verla por la televisión"

Pasó el ataque de pánico después de que los aficionados se frotaran los ojos con la fotografía de la jugada, se confirmó que se trataba de una lesión menor y, a la espera del fallo del comité de competición -el acta es tan exacta como lo fue la actuación del árbitro Fernández Borbalán-, se impone el arrepentimiento de una parte y de la otra una seria advertencia para evitar males mayores.

A un lado compareció Ujfalusi, que prefirió el fútbol al hockey hielo, defensor de la tesis que los zagueros respetados son aquellos que despiertan miedo en los rivales. El domingo entró a destiempo a Messi y su planchazo le dobló el tobillo: "Aunque la imagen publicada de la entrada asusta, no voy con intención de lesionarle, fui a por la pelota", confesó el checo, quien solo había sido expulsado en un partido contra el Espanyol. "Quería pedir disculpas a Leo", añadió. "No puedo cambiar la idea de los aficionados, pero no soy un jugador duro ni estaba caliente. Tuve mala suerte. Hay entradas más duras que esa. El problema es que se hizo a Leo, el jugador más interesante del mundo, y la gente lo ve diferente, cosa que entiendo. Es el mejor y los mejores tienen que jugar para que el aficionado disfrute. Ya me excusé el domingo y hoy le mandé un mensaje desde el teléfono del Kun. Hay que proteger a los jugadores, no solo a Messi y a los mejores, sino a todos".

Villa representó a la otra parte como compañero de Messi: "La entrada fue escalofriante, da repelús verla por la televisión. Es una suerte que no haya pasado a mayores. Leo siempre está más expuesto a estas situaciones porque lleva la pelota al pie y juega a una gran velocidad, pero su constitución lo soporta todo. No creo que Ujfalusi tuviera mala intención".

Los jugadores azulgrana se alinearon con su entrenador, Guardiola, quien utilizó la jugada como síntoma: "Los árbitros no tienen que proteger a Messi o a Ronaldo, sino a todo el mundo. No deberían ser tan permisivos porque luego pasan desgracias". La lesión de Agüero en San Mamés o de Ronaldo en Mallorca pertenecerían al mismo catálogo de la sufrida por Messi e invitan a una reflexión colectiva. Mourinho, sin embargo, se desmarcó: "Lo que ha pasado en el Atlético-Barça que lo comente quien haya participado en ese partido. No opino de partidos en los que no he participado. Yo solo estoy aquí para hablar del Madrid-Espanyol".

La respuesta del técnico del Madrid resulta sorprendente si se tiene en cuenta que nada más comenzar el campeonato pidió protección para Ronaldo: "Cristiano no es débil, es muy fuerte, y tiene una cultura británica que le impide simular las faltas. Aguanta todos los palos que recibe. Él no rehúye la pelea. Es como un jugador de rugby. Normalmente, los jugadores mágicos son poco fuertes, pequeños, se caen mucho, parece que los ha atropellado un camión... Nosotros los latinos somos listos; los ingleses no. Tienen fair play. O Cristiano se adapta y hace teatro o los árbitros se dedican a proteger a los que juegan y no a quienes les gusta la piscina".

Mourinho temía que a Ronaldo "le metieran una hostia" y el delantero cayó lesionado en un tobillo por una entrada de Nunes en Mallorca que le tuvo dos semanas de baja. La defensa de su futbolista contrastó siempre con su distanciamiento respecto a Messi desde que en febrero de 2003 Del Horno fue expulsado cuando el portugués entrenaba al Chelsea. "Seamos serios: Messi ha hecho teatro", afirmó aquel día. "Yo he ido al teatro muchas veces y en Cataluña es de calidad".

Nada le preocupa más a Messi que no poder jugar, aunque sean dos partidos, tras dos temporadas de acción ininterrumpida que le han llevado a ganar el Balón y la Bota de Oro.