"Yo no como de las audiencias"

Dice que lleva dos meses parado -televisivamente hablando- y ya siente un apetito voraz por retomar los fogones. Karlos Arguiñano (Beasain, Guipúzcoa, 1948), el chef más mediático vuelve este lunes a colocarse delante de la cámara. Tras seis años ininterrumpidos en Telecinco, el popular cocinero dará sabor a las tardes de Antena 3.

Pregunta. Debuta en Antena 3 y salta de la sobremesa a la tarde. ¿Cómo se come este cambio de horario?

Respuesta. El nuevo programa será muy parecido, con algunas pequeñas novedades. Lo fundamental es que va a llegar a un público más amplio. Yo cocino para todas las edades y a las ocho y media en las casas, además de las abuelas, ya están los padres, los niños, los estudiantes... Muchos me veían antes de refilón, y ahora tendrán la oportunidad de seguir mis recetas para poder comer sano y crecer mejor y más guapos.

"Yo siempre he hecho el chorra, pero antes no me conocía nadie"

P. Conserva el nombre Arguiñano en tu cocina, pero ¿cuáles son esas pequeñas novedades a las que alude?

R. Diferencia habrá poca, ya digo. No hay más que ver a los políticos y a los curas. Voy a mantener mi línea habitual: una cocina sana y de mercado, con menús variados por poco dinero y con productos españoles de primera calidad. Estoy por la labor de que España sea un país bien alimentado. Y para ello hay que comer en casa. Muchos no pueden hacerlo a mediodía, pero sí por la noche. Y para mí comer bien no es comer ni mucho ni caro.

P. ¿Y cómo se va a estructurar el programa?

R. Contaré con la colaboración de Ainhoa Sánchez, que hablará de las propiedades nutricionales de la receta del día. Esto me parece muy interesante porque hay mucha gente que cocina bien, pero que no tiene conocimientos de nutrición. Además, un día a la semana un personaje muy conocido de los espectadores se someterá a un test gastronómico. El primero será Matías Prats; por algo yo soy su telonero. Hablará de si guisa en casa o no; si le gustan los platos de cuchara o si prefiere la carne al pescado. También queremos que cuente alguna horrenda anécdota culinaria.

P. ¿Y qué otros personajes van a pasar por el plató?

R. Perdón, pero la directora [Jone Miren Goenaga] no me deja hablar de eso; quiere que sea una sorpresa.

P. Creo que uno de sus grandes caballos de batalla es combatir la obesidad infantil.

R. Sí, lo tengo constantemente en la cabeza. Hay un 20% de niños obesos en España y eso quiere decir que sus padres o madres no se están enterando de la fiesta. Igual es por desconocimiento, pero están alimentando mal a sus hijos o comen demasiado. Así que el apoyo de un médico nutricionista es un buen camino para mejorar.

P. Después de seis años en Telecinco, en julio anunciaba su marcha. "Sé que venimos a una casa seria. Antena 3 nos ofrece un proyecto ilusionante", dijo entonces. ¿Qué es lo que le ofrecía esta cadena que no hubiera hecho Telecinco?

R. He estado en Telecinco seis años seguidos y otros dos años antes. Y cuando me dejan hacer soy feliz. Pero, en el último momento, a la hora de renovar me daban trabajo a mí y a 40 personas más, pero somos una empresa de 200 personas y Antena 3 nos ha contratado a todos. Estoy seguro de que Paolo Vasile [consejero delegado de Telecinco], que es muy listo, hubiera hecho lo mismo que yo.

P. ¿Le molestó que Telecinco justificara la decisión de no renovar el contrato a la pérdida de espectadores, si la temporada pasada cerró la cocina con una media de 1.805.000 seguidores?

R. Es mentira; la cadena había bajado, pero Arguiñano no.

P. ¿A usted las audiencias le quitan el hambre?

R. Yo no como de las audiencias, nunca las he mirado. Lo que intento es hacerlo bien y entretener. En televisión, o entretienes y los espectadores se quedan o se aburren y se van.

P. Lleva usted 21 años dando la cara en televisión. ¿No siente desgaste?

R. ¿Desgaste? No, no... Al contrario. Además, con personas como las que están a mi lado estoy condenado a permanecer mucho tiempo en televisión. Disfruto, gozo y doy trabajo. Empecé de la nada, fui chapista, camarero de discoteca, estudié hostelería, trabajé de pinche, me casé muy joven, con 22 años, tuve enseguida hijos, tengo seis y una adoptada. Y lo que me hace feliz es comer bien, estar con la familia y rodeado de buenos amigos.

P. ¿Para quién cocina? ¿Para amantes de la buena mesa, cocinillas inexpertos...?

R. Cocino para todo el mundo, pero me consta que entre los jóvenes que viven solos tengo muchos seguidores y preparan mis platos. Fomentar la cocina y enseñar a disfrutar me parece importantísimo. Y en España, desde luego, se come mucho mejor ahora que cuando empecé.

P. ¿Es consciente de que más que un chef es un showman?

R. Yo siempre he hecho el chorra, pero antes no me conocía nadie.