_
_
_
_
_
Necrológica:
Perfil
Texto con interpretación sobre una persona, que incluye declaraciones

John Kluge, uno de los empresarios más ricos de EE UU

Donó pequeñas fortunas para programas de becas a minorías

Tres veces el hombre más rico de Estados Unidos según la lista Forbes, John Kluge, forjador de un imperio comercial de 200 empresas y de una fortuna personal estimada en 5.500 millones de dólares, falleció el pasado día 7, a los 95 años, en su casa de Charlottesville, según confirmó la Universidad de Virginia, de la que era uno de los principales donantes.

Como a muchos empresarios exitosos, a Kluge se le consideraba un visionario por adelantarse a las decisiones comerciales de otros ejecutivos y a los gustos del público en general. A mediados de los años ochenta le vendió siete emisoras de televisión (en Los Ángeles, Nueva York y otras grandes ciudades) al magnate australiano Rupert Murdoch, que crearía con ellas la cadena Fox.

Nacido en la localidad alemana de Chemnitz en 1914, emigró a EE UU a los ocho años de edad, en periodo de entreguerras. Estudió economía en las Universidades de Wayne y de Columbia. Luchó en el bando aliado en la II Guerra Mundial y con el dinero que recibió del Ejército al volver a casa comenzó a invertir en emisoras de radio y en la compraventa de alimentos.

A finales de los años cincuenta compró el 25% de acciones de la red de televisión DuMont a la productora Paramount por 4 millones de dólares. Desde su cuadro ejecutivo, y como accionista mayoritario, la renombró Metromedia y la convirtió en la mayor red independiente y de emisoras no afiliadas del país.

Con ella inventó la contrapro-gramación: emitía contenidos distintos de los que solían ofrecer de forma homogénea, en los mismos horarios, las grandes cadenas: ABC, CBS y NBC. En 1984 compró el resto de acciones y la convirtió en una compañía privada. El precio que le pagó Murdoch en 1985 por ella fue de 2.000 millones.

Según dijo en una entrevista a la revista Forbes en 1990, "la televisión se estaba convirtiendo en un medio competitivo", y él no se sentía capacitado "para desarrollar la cuarta cadena de televisión nacional". Su olfato era proverbial. Vio venir la gran eclosión de la telefonía móvil en 1983, comprando un conglomerado de empresas telefónicas celulares por 300 millones. Las vendió a Southwestern Bell tres años después por 1.600 millones

Su dinero fue creando más dinero. Compró el equipo de baloncesto de los Harlem Globetrotters y la compañía de patinaje sobre hielo de los Ice Capades, así como las cadenas de restaurantes Bonanza y Steak & Ale.

Con los años se convirtió en un filántropo. Donó a su alma máter, la Universidad de Columbia, pequeñas fortunas para programas de becas a minorías. Pues como recordó en una entrevista a The New York Times en 1993, Columbia le dio una beca en 1933, cuando no tenía dinero. Su última donación, en 2007, fue de 400 millones. También financió la Biblioteca del Congreso de Washington con 73 millones de dólares.

John Kluge, en 1994.
John Kluge, en 1994.AP

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_