Suspendido un juicio contra el violador del chándal

La incomparecencia de un testigo obligó a suspender un juicio por agresión sexual contra Andrés Mayo, conocido como el violador del chándal, quien ya cumple condena de prisión por otras ocho violaciones o ataques a mujeres ocurridas entre 2006 y 2007 en A Coruña. Le fueron impuestos por estos delitos un total de 73 años de cárcel.

La vista oral prevista para ayer responde a una decisión de la Audiencia de A Coruña, que ordenó repetir un juicio en el que se impuso a Mayo un año y nueve meses de prisión por agredir sexualmente en abril de 2004 a una mujer. La Audiencia aceptó las tesis de la defensa del violador del chándal, que alegó indefensión por estar el procesado casi un año sin tener asignado un abogado de oficio. La vista quedó suspendida sin fijarse una nueva fecha dado que no compareció un testigo, el policía que acudió al lugar de la agresión, tras oír las llamadas de auxilio de la víctima.

La fiscalía, en el primer juicio que ahora deberá repetirse, pidió una pena de cuatro años de cárcel para Mayo tras considerar probado que el hombre agarró a su víctima por la espalda y tras arrastrarla hasta un portal de una céntrica calle coruñesa, consumó la agresión sexual.

Tras cumplir 12 de los 106 años de cárcel a los que fue condenado, el violador del chándal obtuvo la libertad condicional en 2002 y se instaló en A Coruña, donde era peón de la construcción.