El PSPV exige a Camps una campaña "sin caja B y en igualdad de condiciones"

Los socialistas valencianos van a poner el dedo en la llaga de la financiación irregular del PP, que un informe policial de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) aportado al sumario del caso Gürtel ha puesto de nuevo en evidencia. La supuesta implicación de varios conocidos constructores en la financiación de actos electorales del PP a través de la empresa Orange Market en las últimas campañas es una de las líneas que investiga la justicia en la instrucción que afecta al presidente de la Generalitat, Francisco Camps, su partido y su gobierno. La secretaria de Organización del PSPV-PSOE, Elena Martín, retó ayer al PP valenciano a que la de las próximas elecciones municipales y autonómicas sea una campaña electoral "limpia".

"A ver si son capaces de hacerlo sin utilizar su ya famosa caja B y en igualdad de condiciones", declaró Martín, que añadió que alguien en el PP "debe explicar cuánto dinero se gastaron en la campaña fraudulenta". Y preguntó "hasta qué punto llegó la estafa" y "qué nivel es admitido por el código ético del PP".

"Los socialistas valencianos, como el resto de la sociedad valenciana, quieren que el presidente de la Generalitat nos explique si existe una caja B ahora e indique dónde está", dijo la secretaria de Organización del PSPV-PSOE, que inquirió "con cuánto dinero cuenta el PP para la próxima campaña" y reclamó a Camps que se comprometa a que sólo va a gastar "el dinero que tiene legalmente".

El PSPV-PSOE celebra hoy en Elche una reunión de su comité nacional, máximo órgano entre congresos, en la que se dará formalmente inicio al proceso de elecciones primarias. El secretario general, Jorge Alarte, hará un informe sobre la estrategia política del partido, tras escenificar la unidad con el sector que encabeza Joaquim Puig y después del anuncio de Antoni Asunción de que buscará avales para competir en las elecciones internas.