España alarga la vida de su planta de uranio ante el renacer nuclear
La mayor eléctrica coreana invierte 54 millones en Salamanca en busca del mineral
La central pública de tratamiento de uranio tenía los días contados. El pasado 15 de julio terminaba el plazo para comenzar el desmantelamiento de la planta Quercus, en Saelices el Chico, Salamanca. Pero la empresa pública del uranio, Enusa, ha conseguido del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) una prórroga hasta final de 2011 para desmontarla.
Enusa espera a ver si la firma australiana Berkeley Resources decide reabrir la minería del uranio en España. La aventura de esta empresa acaba de recibir un espaldarazo al firmar con la principal eléctrica coreana, Kepco, un preacuerdo por el que esta invertirá 54,35 millones de euros en las prospecciones. Kepco opera 20 nucleares y tiene seis más en construcción. Los ecologistas critican el plan y piden la suspensión de las actividades relacionadas con la energía nuclear.
España abandonó la minería del uranio a principios del siglo XXI. Desde entonces, la empresa estatal Enusa se ha dedicado a cerrar minas al considerar que era más barato importarlo. Enusa abastece de uranio a los ocho reactores nucleares españoles, que producen un 18% de la electricidad. La planta Quercus de concentración de uranio cerró en 2002 y su desmantelamiento debía estar ya en marcha. Sin embargo, el pasado 21 de marzo, Enusa pidió al CSN una prórroga hasta final de 2011 para ver si la minería es rentable. El pleno del organismo regulador autorizó la prórroga por unanimidad el pasado junio.
La búsqueda de uranio volvió a España en 2008, cuando la firma australiana Berkeley Resources firmó un acuerdo con Enusa para utilizar sus estudios e instalaciones y crear un consorcio por si la explotación del uranio era finalmente rentable. Aunque el precio del uranio ha caído respecto al boom de 2007, sigue alto. Con la apertura de nucleares en buena parte del mundo, las mineras creen que muchas minas volverán a ser rentables. El pasado 10 de agosto, Berkeley anunció que ha firmado un preacuerdo con una de las mayores eléctricas del mundo, la empresa pública coreana Kepco, por la que esta invierte 70 millones por el 35% de la explotación de Salamanca, lo que supone un salto enorme en la búsqueda.
"Tememos que ahora sí vaya en serio. No es lo mismo que el plan sea de una pequeña minera que de una eléctrica que gestiona nucleares, térmicas, hidráulica", explica Fernando Ramos Encalado, portavoz de Ecologistas en Acción en la materia. Los ecologistas critican la vuelta a la minería del uranio, pero el alcalde de Saelices, Francisco Bernal, apoya el proyecto: "La planta de Enusa empleaba a casi 200 personas. Su cierre fue un palo para la comarca, así que esperamos que Berkeley tenga éxito". El alcalde afirma que los dueños de los terrenos en los que se realizan las catas no han puesto pegas a las prospecciones.
También hay proyectos en Guadalajara, con la oposición del Gobierno autónomo, y en Extremadura.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.