Las 'varietés' se reinventan

Que la vida es un cabaret ya lo recordaba Liza Minnelli en 1972 cuando interpretaba en la película Cabaret a la aspirante a actriz Sally Bowles que la hizo mundialmente conocida, y de paso recuperó un género que tras su apogeo en los años 20 y 30 había entrado primero en la decadencia, y luego en el olvido. Atrás quedaba el esplendor del Moulin Rouge en el barrio parisino de Pigalle, los oscuros cabarets berlineses o los espectáculos de revista y variedades.

Desde hace unos años, el cabaret vive una segunda edad de oro. El Cirque du Soleil ofrece en Las Vegas de manera permanente su primer espectáculo para adultos, Zumanity, que bebe directamente de las fuentes del espectáculo de varietés. Desde hace dos meses el Teatro Circo Price ofrece un cabaret contemporáneo en Madrid. Y en Zaragoza el café El Plata ofrece un cabaret ibérico bajo la dirección artística del realizador Bigas Luna (ver página 38).

El espectáculo permanecerá en cartel hasta el 29 de agosto

Cabaret Burlesque, el espectáculo que se presenta a partir de hoy en el Teatro Campos Elíseos y hasta el próximo día 29 cumple todos los requisitos del verdadero cabaret: es irreverente, rebosa energía, posee unas adecuadas dosis de erotismo y resulta, sobre todo, divertido.

Como en todo buen cabaret que se precie, los asistentes podrán disfrutar de unas copas o incluso cenar. Desde el momento en el que se atraviesa el umbral de la puerta del Campos el asistente se sentirá desinhibido y con ganas de pasar un buen rato.

En el espectáculo se podrá disfrutar de unas vedettes curvilíneas que contonean su cuerpo al ritmo de una danza oriental, de una decadente cantante de vodevil alemana, chicos ligeros de ropa y una exótica stripper. Como maestra de ceremonias ejerce Doña Concha (Blanca Resano), la representante de la asociación de vecinos, que hará todo lo posible por prohibir ese "espectáculo indecente en el que la gente va ligera de ropa". También le acompaña Nacho Embid, el director del espectáculo, quien, convertido en Nacho de Noche, moderará la velada con descaro, humor e ironía.

Embid señaló ayer en la presentación del espectáculo en Bilbao que se trata de un montaje "vivaz, lleno de energía y rápido, con números cortitos, muy divertidos y de belleza extrema".

Los espectadores que se acerquen hasta algunas de las cinco sesiones diarias que se han programado (llamadas Café de Pólvora, 16.30; Cabaret de Tarde, 19.30; Cena Cabaret, 22.30; Copa Cabaret, 23.30, y Golfa, 01.30), "se verán involucrados en el espectáculo sin darse cuenta", señaló Embid. "La cuarta pared teatral desaparece dejando a los actores total libertad para que campen a sus anchas entre el público", subrayó.