"Soy muy egoísta"

Perdió España ante Suiza y a Cesc (Arenys de Mar, Barcelona) se le torció el gesto: Navas y Pedrito, dos recién llegados, salieron antes que él al campo. El centrocampista del Arsenal asume que nada le molesta más que no jugar desde la perspectiva de un futbolista que a los 23 años ha participado en dos Mundiales y es capitán de los gunners. Llegan los octavos de final y necesita sentirse útil.

Pregunta. ¿Tanto les trastocó la derrota frente a Suiza?

Respuesta. Fue un palo por lo inesperado. En la Eurocopa no perdimos un partido, así que nos pilló por sorpresa. El problema es que pensamos en Chile porque sabíamos que iba a ser el partido más complicado y nos olvidamos un poco de que esto es un Mundial, que el primer partido también es complicadísimo. En la Eurocopa pensamos partido a partido y nos fue bien. Aquí, al caer en el primero, nos entró un subidón de responsabilidad.

"Si no juego, me enfado con el mundo. Espero que me llegue el protagonismo"

"Portugal no encaja goles. Es competitivo, no está para tonterías"

P. ¿Por eso costó soltarse contra Honduras y Chile?

R. En parte, sí. Pero nos fue bien ganar a Chile como ganamos, a cara o cruz y sin jugar muy bien, sin tener el día. Fuimos muy expeditivos. Aprovechamos su error y, a la primera que tuvimos, marcamos el segundo gol. Sin hacerlo exageradamente bien, ganamos bien. Es importante también.

P. Desde fuera, la sensación es que usted se quedó con un palmo de narices al no entrar en el primer encuentro...

R. Sí, quería jugar. Estaba el partido enredado y sabía que le podía dar aire. Estaba preparándome y tenía claro qué hacer. No estoy muy acostumbrado a estar en el banquillo, pero, cuando me toca, en cierta manera también juego. Pienso en lo que haría si estuviera en el campo. Me veo corriendo y estoy pendiente de dónde haría daño. Mentalizas tu imagen dentro del campo.

P. Y Del Bosque le deja fuera. Entonces, ¿qué pasa?

R. Me cabreo. Pero no con el entrenador. Me cabreo con el mundo, conmigo, por estar en el banquillo en vez de en el campo. Yo quiero jugar. Lo que más me gusta del fútbol es jugarlo, hasta en la play. Soy muy competitivo.

P. Eso lo repite mucho. ¿Qué significa?

R. Qué no sé vivir el fútbol sin exigirme siempre más. Si gano, quiero meter un gol o dar un pase. Si meto un gol, quiero que el equipo meta cinco más. Incluso en los entrenamientos. Necesito competir.

P. Dice que se enfada con el mundo. ¿Y con el entrenador?

R. Sería de muy mal gusto enfadarme con él o con los compañeros. No. Respetaré siempre la decisión del entrenador y a quien juegue, que es mi compañero. El fútbol sin el compañero no existe, no tiene sentido. Y al compañero se le respeta como se respeta lo que decide el entrenador aunque no te guste.

P. Suena muy inglés...

R. No sé si inglés, catalán, español... Pero lo siento así. Eso no quita que me quiera sentir protagonista.

P. Usted era el capitán del equipo cadete del Barça de 1987: Valiente, Piqué, Messi, Víctor Vázquez, Planchería.... Creció con esa sensación de ser el jefe, el jugador de referencia...

R. Bueno, Gerard y yo teníamos la confianza del entrenador, mucho protagonismo. Pero en esas categorías no mandas en el vestuario. Yo era el capitán y en el campo Gerard y yo éramos un poco quienes marcábamos el juego, pero también por la posición. Messi y Víctor metían los goles...

P. Pero usted siempre ha sido capitán. Incluso en el debut con la selección sub 16. Y lo es del Arsenal a los 23 años.

R. Sí. Me gusta esa faceta de asumir la responsabilidad más allá del partido. Me siento cómodo, importante. Eso me gusta.

P. Probablemente, en la absoluta es en la que más tiempo ha sido suplente desde que era cadete.

R. Es el reto que se me ha negado hasta ahora. Siempre he venido, pero nunca he sido titular indiscutible. He tenido que aprovechar mucho los minutos que me han dado porque sabía que o jugaba bien o... Pero la competencia ha sido superagradable porque la afronto con futbolistas excelentes. No me gusta ser suplente, pero, claro, si juegan Xavi, Iniesta, Busquets, Silva, Xabi Alonso, Navas... Son muy buenos. Lo entiendo, yo lo entiendo, aunque no me guste. Yo quiero ser titular.

P. ¿Recuerda cuándo lo fue por última vez?

R. Sí. ¿Contra Austria? Ganamos 1-5 y marqué el 1-1. ¿O contra Estonia?... Jugar siempre he jugado, pero el futbolista es egoísta y quiere más. Y se ha de aceptar que yo soy egoísta. En otras cosas, no, pero en jugar soy muy egoísta. Todos lo somos, en verdad. Hemos de aceptarlo así.

P. Si no, no serían futbolistas...

R. Claro. Somos ambiciosos. Queremos más. Pero, por mi manera de ver la profesión, es algo positivo.

P. El otro día dijo que los 50 partidos con la selección son falsos.

R. Porque no tengo la sensación de haberlos jugado. Si no juego tres cuartas partes del partido, si no te da tiempo a tener la sensación de que has participado... No cuento los que he salido 10 o 15 minutos, y han sido bastantes. Y no me estoy quejando. Yo valoro enormemente la suerte que tengo a mi edad. Si he jugado 50, aunque sean ratitos... En el fondo, es porque estoy en la selección. A los 23 años. En mi segundo Mundial.

P. ¿Tiene la sensación de que su momento está por llegar?

R. Espero que sí. Espero que esto acabe de comenzar. Espero que un día me llegue ese protagonismo. Seguiré trabajando.

P. La sensación es que depende de la jubilación de Xavi.

R. Xavi es, de todos los factores, el menos importante. En el Barça juegan juntos Iniesta, Busquets y él. El entrenador es el que decide. Xavi es un referente, pero, por mucho que se nos quiera comparar, somos diferentes. Él baja mucho a recoger la pelota. Yo antes era así, de pequeño, pero hace un par de años juego más arriba. Tengo más llegada de cara, puedo dar más asistencias y meter más goles. Por mucho que se nos intente comparar, y aunque tenga cosas de Andrés, Busi o Xavi porque hemos salido de la misma escuela, creo que todos somos diferentes y complementarios.

P. Ha dicho que Xavi está recibiendo el balón muy arriba y de espaldas, un problema.

R. Yo no dije eso. Solo hablé de que es una posición difícil, pero es la que más puedes disfrutar. Yo juego ahí y me lo paso bien en el fútbol muy guerrero, pero expliqué que no es una posición muy fácil.

P. Para la afición, Portugal es Cristiano Ronaldo. Ustedes se esfuerzan en desmentirlo.

R. Para empezar, Portugal no encaja goles, lo que demuestra que es un equipo muy competitivo y con una defensa que no está para tonterías: Alves, el capitán del Oporto; Carvalho, un tío consagrado en Inglaterra; Pepe... Arriba, Portugal es mucho más que Cristiano. Son muy potentes arriba y a la contra hacen daño. Son un equipo. Y les respetamos como tal.

P. ¿Por qué a mucha gente CR le cae mal?

R. A mí, no. Le he conocido en algún evento. Me cae bien. Tiene una imagen... Es la que tiene y seguramente la que le conviene tener. Pero no es así en la realidad. Es un gran jugador.

P. ¿Teme que Portugal utilice la vía Mourinho, se eche atrás y se convierta en un muro?

R. Yo prefiero jugar como lo hace el Arsenal, como lo hizo contra el Barça, de cara, como lo hace España, a ganar de otra manera. Pero el margen de error es tan pequeño... Una decisión arbitral, un volcán que te hace ir en autobús a Milán, una pelota que bota mal y se va a Cuenca cuando era gol....

P. ¿Dejará el Arsenal este verano?

R. No sé... Ya veremos. Ahora no tengo la cabeza en eso. Lo único que puedo decir es que estoy orgulloso de ser capitán del Arsenal, un club en el que me han dado tanto cariño, respeto y afecto que a veces digo que me ha tratado mejor que mi propia familia. Cuando me retire, podré decir muy orgulloso que fui su capitán.

P. ¿Cuántos números de teléfono tiene?

R. Ahora, tres. Pero, desde que llegué a Inglaterra, si no he tenido 25 no he tenido ninguno.Sudáfrica 2010

Octavos de final: España-Portugal