_
_
_
_
Necrológica:
Perfil
Texto con interpretación sobre una persona, que incluye declaraciones

Hua Junwu, padre de la caricatura política en China

Mao hizo que canalizara sus críticas "hacia los objetivos adecuados"

Hua Junwu, decano de la caricatura política y uno de los más populares humoristas gráficos de China, falleció el domingo pasado en Pekín a los 95 años. Dotado de una mirada afilada y un agudo sentido crítico, retrató a lo largo de su extensa vida profesional innumerables personajes y escenas de la azarosa historia del país durante el siglo XX y principios del XXI.

Sus dibujos, de trazos simples, representaban a menudo caracteres vestidos de forma descuidada, con el pelo revuelto; estos eran simples, pero con fuerte presencia. A pesar de la aparente sencillez de su técnica, sus viñetas dejaban fluir de manera muy viva el espíritu interior de los personajes. "Hua será recordado como el pionero de la caricatura política en China", dijo Zhang Yaoning, vicepresidente y secretario general de la Sociedad de Investigación de la Caricatura Periodística, en el diario China Daily.

Retrató el azaroso siglo XX de su país con sarcasmo y actitud desafiante

La juventud de Hua Junwu estuvo marcada por un espíritu rebelde que se vería tamizado con los años. Nació en 1915 en Hangzhou (capital de la provincia costera de Zhejiang), donde, en 1930, siendo un estudiante de secundaria, comenzó a publicar sus primeros dibujos en una revista escolar. Una de sus primeras viñetas, Estudiantes recibiendo inyecciones, muestra a unos niños con gestos exagerados de dolor en el rostro durante una campaña de vacunación.

Tres años después, fue expulsado del colegio por protestar contra un profesor que había tratado de manera injusta a sus compañeros, según cuenta la prensa china. Hua se mudó a la cercana Shanghai, donde, de nuevo, tuvo problemas en varias ocasiones por su actitud desafiante y sus dibujos críticos con sus profesores. En 1936, comenzó a trabajar en un banco.

Su carrera como caricaturista político comenzó en Shanghai. Allí conoció a dibujantes chinos y extranjeros que le influyeron profundamente. A menudo representaba esquemáticas, aunque vívidas, muchedumbres de gente. "Me gustaba pintar cuando era niño. Pero no podía dibujar bien escenas estáticas. Opté por viñetas porque me gusta dibujar de forma informal, reflejar realidades sociales", escribió en su autobiografía.

Cuando, en 1937, estalló la guerra contra Japón y Shanghai cayó en manos enemigas, Hua se fue a Yan'an, base revolucionaria y cuartel general de los comunistas chinos, liderados por Mao, en la provincia de Shaanxi. Allí aprendió que "los dibujos deben estar dirigidos a las masas" y su estilo cambió. Mao le instó a que canalizara sus críticas y su sarcasmo "hacia los objetivos adecuados". Su trabajo más conocido durante esa época es una caricatura del líder nacionalista y enemigo de Mao, Chiang Kai-chek, quien tras ver el dibujo le colocó en la lista de las personas más buscadas.

A finales de 1949, tras la victoria de los comunistas sobre los nacionalistas y la creación de la República Popular China, Hua Junwu comenzó a trabajar en el Diario del Pueblo -órgano oficial del partido- como responsable de la sección de Cultura, donde creó una columna de viñetas noticiosas.

Como muchos otros intelectuales de su generación, sufrió los avatares de la Revolución Cultural (1966-1976), tras la cual fue nombrado vicepresidente de la Asociación de Artistas de China. A partir de ese momento, sus dibujos tendrían un carácter más social que político.

Caricatura de Hua Junwu.
Caricatura de Hua Junwu.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_