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Las Cortes aprueban una ley de Régimen Local de "coste cero"

Blasco consigue el apoyo de Compromís al aceptar a Morera varias enmiendas

La nueva Ley Valenciana de Régimen Local incluye un Fondo de Cooperación Municipal que, según su artífice, el portavoz del PP y consejero de Solidaridad y Ciudadanía, Rafael Blasco, "contribuirá a mejorar la situación financiera de los ayuntamientos". La norma, que desarrolla un mandato del Estatut d'Autonomia y es la primera de sus características en España, sin embargo, "nace muerta" en opinión del diputado socialista Joaquim Puig.

Apoyada con los votos del PP y de la Coalició Compromís, la ley fue rechazada por el PSPV-PSOE y cosechó la abstención de Esquerra Unida. La falta de consenso obedece precisamente a la negativa de los populares a reflejar en la ley algún compromiso de dotación económica del Fondo de Cooperación, que se regulará mediante un reglamento. Los socialistas exigían el cumplimiento del pacto que se alcanzó en 1999 con el entonces presidente Zaplana para establecer un fondo incondicionado y proporcional a la población para financiar los municipios.

El portavoz popular fija los recortes de sueldo de los diputados
El PP acusa a los socialistas de "autoexcluirse" del consenso

El socialista Puig exhibió un informe sobre la ley de la subsecretaria de la Consejería de Presidencia que textualmente reconoce el "coste cero" de la norma. "Se estima", dice el informe, "que no se desprenderá coste alguno de la aprobación del presente anteproyecto pues, en lo que respecta a la creación del Fondo de Cooperación Municipal de la Comunidad Valenciana, no supone coste económico inmediato ya que se remite en cuanto a su dotación a las futuras leyes de Presupuestos".

Esa circunstancia llevó a Puig, que defendió también el mantenimiento de la ley de coordinación de diputaciones, a afirmar: "Esta es una ley de Blasco, de esas que él hace y tienen que reformarse al poco tiempo. Si no recoge la financiación local, no sirve de nada".

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El portavoz popular, César Augusto Asencio, acusó a los socialistas de "autoexcluirse" y de "tirar por la borda" el consenso alcanzado en la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP), cuya presidenta, la alcaldesa de Alzira, Elena Bastidas, del PP, estaba en la tribuna de invitados. Según Asencio, la ley mejora la "transparencia" de los cargos públicos y la participación ciudadana en la gestión local

Enric Morera, de Compromís, a quien el PP aceptó varias enmiendas a cambio del voto favorable, coincidió con Asencio en que la ley es fruto del esfuerzo del "municipalismo valenciano y está basada en los trabajos de la FVMP" y añadió que no puede resolver el problema de la financiación local porque eso ha de ser objeto de una ley específica. Por su parte, Lluís Torró, de Esquerra Unida, a quien el PP aceptó también varias enmiendas, en su caso a cambio de la abstención, calificó de "insuficiente" la ley y reclamó un reglamento para dotar el Fondo de Cooperación Municipal antes de que acabe la legislatura.

En la misma sesión, el PP rechazó las enmiendas a la totalidad del PSPV y de Compromís a la proposición con la que los populares quieren modificar la ley de senadores territoriales. La iniciativa, presentada por Rafael Blasco, se ha justificado por la necesidad de adaptar esta ley al nuevo marco estatutario. El socialista Antoni Such, la portavoz adjunta de Compromís Mònica Oltra y la diputada de Esquerra Unida Marina Albiol coincidieron en descalificar la propuesta popular. El socialista les acusó de presentar un cambio legislativo en una cuestión que solo ha tenido un problema en 20 años: el generado por el PP con el nombramiento de la secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, como senadora territorial. Un nombramiento que el PP dilató durante 8 meses con la pretensión de que Pajín tenía que comparecer en las Cortes.

Oltra acusó al PP de pretender imponer una "inquisición previa" a los candidatos a senadores y lamentó que el Código Penal no prevea mecanismos para defender la democracia de quienes la atacan con guante blanco. Albiol, de EU, lamentó que el PP tuviese a los diputados hablando de "ocurrencias" en vez de problemas como el paro o el deterioro de los servicios públicos. El popular Rafael Maluenda aprovechó su turno de defensa de la iniciativa para volver a arremeter contra la socialista Leire Pajín, a la que llegó a cambiar el apellido por Pallín, de manera premeditada.

Por otra parte, Blasco anunció ayer que los populares, tras haber pedido los socialistas que se redujesen los sueldos de los diputados en solidaridad con la situación de crisis, presentarán una propuesta que reduce en un 15% las subvenciones a los grupos parlamentarios y los sueldos de los portavoces. La rebaja será del 12% para los portavoces adjuntos y del 10% para los diputados. La propuesta, explicó Blasco, no se negociará con la oposición, que había pedido corresponsabilizarse de los recortes necesarios para salir de la crisis.

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