El PSOE se asegura una salida para corregir el error de la ley de Aguas

El error que cometió el PSOE al trastabillarse con los números y apoyar 29 enmiendas del PP a la ley de Aguas (que invalidan precisamente lo sustancial de esta norma) en la votación final del Parlamento va a ser difícil de subsanar. Mucho más de lo que pensaron los socialistas nada más producirse el resbalón. Los populares han avisado de que se opondrán con los medios de los que dispongan -incluido el judicial- a cualquier solución que considere este asunto como un despiste formal que contraviene la voluntad de fondo de la mayoría de la Cámara. Por eso, ayer mismo el grupo socialista registró una proposición de ley con el texto original. El problema es que la demora para que la ley entre en vigor puede estirarse hasta tres meses.

Los populares avisan de que "pelearán" para evitar el cambio

Las palabras de ayer del secretario general del PP andaluz, Antonio Sanz, no invitan a pensar que los populares vayan a aceptar de buen grado una rectificación rápida por los canales que permite el Reglamento parlamentario, como el artículo 122, que da opción a corregir "incongruencias" en el plazo de un mes. "Vamos a pelear con uñas y dientes", sentenció Sanz, quien vino a decir ayer que si el PSOE se equivocó al votar es asunto suyo.

La diputada popular Carolina Fernández Vigo apuntaló esta tesis: "El Parlamento andaluz no es un patio de colegio, las votaciones se pierden o se ganan". Añadió que el PSOE tiene dos caminos: presentar un nuevo proyecto de ley o esperar a que se publique en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) y plantear enmiendas al articulado, a través de una proposición de ley. Los socialistas se han asegurado la última opción.

Tras la reunión de la permanente de la ejecutiva socialista, el vicesecretario general socialista, Rafael Velasco, se quejó de la falta de compresión de los populares ante un "error humano", así como que hayan decidido "machacar" una ley que ha sido consensuada con varios colectivos sociales. "Esto es inconcebible en democracia, se trata de un nuevo capítulo de la perversión democrática en la que está instalado el PP", dijo Velasco, quien trajo a colación otros casos en el Congreso de los Diputados en los que el fallo fue del PP y el PSOE se avino a respetar la voluntad de la mayoría. "Es la estrategia del desgaste, el acoso y el derribo", subrayó el socialista. Velasco agregó que el grupo parlamentario no va a "castigar" a ningún compañero por haber cometido un traspié y dijo que "una anécdota no va a eclipsar el buen trabajo del grupo".

En el caso de que no se alcance un acuerdo para acortar los plazos, la proposición de ley registrada ayer seguirá el proceso normal, por lo que, hasta principios de julio la ley de Aguas original no verá la luz.

Por otro lado, Rafael Velasco restó importancia al revuelo organizado tras saberse que la dirección del PSOE de Málaga y la ejecutiva regional habían llegado a un acuerdo para proponer como candidata a la alcaldía a María Gámez (actual delegada de la Junta en esta provincia) sin el visto bueno del federal. El dirigente socialista dijo que la "filtración" estuvo mal hecha y así se le ha dicho a quien la hizo, aunque la responsabilidad última era suya. Aseveró que el PSOE andaluz tiene "claro" los candidatos que quiere en las ocho capitales y poblaciones de más de 50.000 habitantes, aunque no los anunciará hasta consensuarlos, como siempre, con la dirección federal.